No me refiero a la magnitud de la caída en el producto que se espera para este año. Las expectativas cambian día con día y los pronósticos optimistas estiman una caída de al menos 3%. Me refiero a la magnitud del apoyo que se necesitaría en México para paliar en algo los efectos que esta crisis podría tener sobre la economía del país.
El paquete de apoyo aprobado por Estados Unidos es de dos billones de dólares (millones de millones), aproximadamente 10% de su PIB. Los detalles del paquete son complejos y su implementación lo será aún más. Las personas en lo individual recibirán un apoyo monetario en función de su ingreso, las pequeñas empresas recibirán 20% del total del paquete anunciado, las grandes 25% del mismo. Los 500 mil millones asignados a las grandes empresas se otorgarán dependiendo del sector y el impacto negativo de la crisis. De los 377 mil millones que recibirán las pequeñas empresas, 350 se darán en créditos de hasta 10 millones para las empresas que los soliciten y podrán ser usados para pagar los costos fijos, como la renta, o para pagar la nómina y poder mantener a los empleados durante la crisis. Los 17 mil millones restantes se asignarán para las empresas pequeñas que necesiten cubrir sus costos operativos. Es decir, en este paquete hay programas de transferencias directas y apoyos al empleo. Aún así, con estos montos, la semana pasada 6.6 millones de trabajadores solicitaron ayuda por desempleo. En dos semanas, 10 millones de personas, equivalente al 10% de las personas ocupadas en Estados Unidos, perdieron su empleo.
Canadá tiene un apoyo más modesto como porcentaje del PIB, alrededor del 4%, pero al parecer bien estructurado. Hay programas específicos para los niños, para los adultos mayores, para la población indígena, y me interesa destacar el apoyo al empleo, un beneficio fiscal de hasta 2 mil dólares canadienses al mes durante cuatro meses que puede ser solicitado en línea.
Para poner los números en contexto, un punto porcentual del PIB de México es igual a 242 mil 391 millones de pesos. 5% es igual 1.21 billones de pesos y 10% equivale a 2.42 billones.
Se han anunciado algunas ideas, como la ampliación del programa de tandas para el bienestar que otorgaría créditos por 25 mil pesos a las pequeñas y medianas empresas, y el adelanto de un bimestre en la pensión para adultos mayores. Pero sumando lo que ha dicho el presidente en diversas mañaneras, más lo señalado en el informe del domingo, no queda claro cuáles programas son nuevos y necesitarían nuevos recursos, y cuáles son continuaciones de los programas ya en curso y presupuestados. En la totalidad de los fideicomisos a los que ha hecho referencia el presidente hay 740 mil 572 millones de pesos, incluyendo lo que queda del FEIP. (Sería un error utilizarlos todos sin hacer una decisión estratégica, por cierto). Hasta el momento, no hay claridad en los programas específicos ni en los recursos que se necesitarán.
Es urgente el diseño de un plan para atender la emergencia económica. Un plan debe tener objetivos y un conjunto de acciones para lograrlos. Hoy tenemos algunas ideas, pero sin estructura. La columna vertebral de ese plan deberían ser los apoyos al empleo.
@ValeriaMoy