Este fin de semana he desempolvado un libro que permanecía en mi biblioteca en espera de su relectura. Reflexiones sobre la música. Título de los textos acerca de la música publicados por Editorial DEBATE S.A. Madrid; 1998. Escritos por Paul Henry Lang, [1901/1991] traducidos por Francisco Páez de la Cadena. 294 pp.
El profesor Lang fue, según nos lo hace saber la solapa de la primera de forros, catedrático en la norteamericana Universidad de Columbia, editor de Musical Quartely, y fundador de la Sociedad Americana de Musicología. La antología recoge lo mejor de sus ensayos dirigidos al gran público destacando los inéditos, en los que se empeñaba antes de fallecer. El prólogo es de Christoph Wolff de la Universidad de Harvard. Henry Lang, ha sido el mayor erudito a propósito de la musicología norteamericana, sin embargo como en muchos otros casos, éste personaje no nació en Norteamérica, sino en Hungría habiendo estudiado en Budapest con Soltan Kodaly quien junto con Bela Bartok, dieron difusión a la música académica húngara y al folclor, trasladándose más tarde a los Estados Unidos con el auspicio de una beca de la Fundación Rokefeller. Su longevidad le permitió abarcar el estudio sistematizado de casi todas las épocas de la historiografía musical, asimismo, su formación literaria en la Sorbona de París, le dio solidez y esplendidez a sus escritos a propósito de la música.
El primer capítulo trata de la dificultad que implica documentar una ya de por si complicada disciplina como lo es la musicología. Llama mi particular atención la sencillez con que Lang señala la responsabilidad que requiere quien se dedica a la investigación musicológica. La formación integral requerida para tal efecto así como el amplio equipaje cultural requerido, entendiéndose como cultura, la complejidad de los fenómenos que aglutinan dando forma al espectro social. La historia estudia los asuntos del pasado, no así los sucesos recientes que forman parte en todo caso de lo novedoso. Diferencia al musicólogo profesional serio, del aficionado redactor de programas de mano, quien resume su conocimiento a la lectura de las contraportadas de grabaciones comerciales. Valiosos ambos, aunque distintos.
Sin embargo, un biólogo premio Nobel jamás tendrá el conocimiento erudito de un habitante de las selvas de Tansmania. Sentencia. Nuevas ideas sobre música antigua, constituyen el capítulo dos. En donde se reflexiona a propósito de Palestrina, Pergolesi, Bach y Haendel. Mozart, Beethoven y el infaltable Wagner a propósito de Tristán e Isolda. La música en la civilización del siglo XX. La dodecafonía, teoría marxista y música. Bartok en la Universidad de Columbia. La película Amadeus.
Un capítulo de suma importancia es el dedicado a la interpretación de la música. Henry Lang destaca la imposibilidad del intérprete de realizar ejecuciones integrales desconociendo los detalles del discurso musical que se expone. Asimismo el investigador no comprenderá el resultado de su erudición si no es capaz de sentir la emoción de la interpretación. Lang reflexiona a propósito de los instrumentos de época; práctica usual en la actualidad.
Reflexiones de la música
- Umbral
-
-
Ramón Macías Mora
Jalisco /