Con admiración y respeto para mi amigo el arquitecto Héctor Benavides Fernández, comunicador ejemplar y maestro del periodismo por sus Casi 82 años... archivo de un reportero)
El ex gobernador Jaime Rodríguez fue encarcelado en marzo, acusado de presuntos desvíos, tres meses después (junio 2022) obtuvo su libertad debido a que un juez le permitió seguir en arraigo domiciliario.
El Bronco sigue su juicio desde su casa y ahora le permitieron ir a su rancho a trabajar. La bendita justicia de nuestro país es laxa con algunos y exageradamente dura con otros.
O peor aún, rayan en la complacencia como en el caso del ex secretario de Gobierno y también gobernador interino Manuel González Flores, que aprovechando esos vacíos de autoridad anda muy campante disfrutando de la buena vida.
Hace días, MILENIO daba a conocer que su proceso lleva más de tres años en la congeladora, y ningún diputado o dirigente de partido dijo esta boca es mía para presionar.
Es una burla para nuestra sociedad que políticos como González Flores, que llegaron con una mano atrás y otra adelante, anden gozando de un bienestar obtenido de manera sospechosa, o al menos esa es la presunción.
Hace algún tiempo en este mismo espacio dimos a conocer cómo en la época de vacas flacas estuvo viviendo a expensas de su amigo el abogado Sergio Tomás Martínez Arrieta, y tras varios años en la función pública ahora es un próspero hombre de negocios dueño de tierras y numerosos bienes inmuebles.
El gobernador Samuel García al dar su opinión del asunto pidió “equidad procesal” y consideró que Manuel González también debería ser procesado por el tema de las Broncofirmas, que al parecer utilizó recursos del estado para apoyar a su amigo.
El llamado de jefe del Ejecutivo debe ser atendido por la Fiscalía Anticorrupción, y al menos descongelar el expediente contra el ex secretario de Gobierno, dado que existen indicios muy claros de todo lo que se le acusa. Los ciudadanos tienen derecho a saber si el señor es o no responsable de haber solapado a su compadre El Bronco, y de ser hallado culpable que enfrente a la justicia, y sea juzgado conforme a derecho como cualquier hijo de vecino.
La pregunta que muchos nos hacemos es si a estas alturas y con tanto tiempo transcurrido, Manuel González sigue todavía en el estado o aprovechó el tiempo que le dieron las benévolas autoridades para cambiar de residencia.
Miguel Ángel Vargas