La difusión a través de redes sociales de un video donde se puede apreciar un evidente caso de abuso policial causó indignación la tarde del domingo entre los suscriptores de diversos grupos comunitarios virtuales de la ciudad de Guanajuato capital.
Las imágenes eran más que elocuentes: un par de unidades policiales, con al menos media docena de elementos, llevaban detenidos a dos presuntos infractores.
En un punto intermedio entre el lugar de la detención y el juzgado cívico municipal, las unidades se apostaron a la orilla de la carretera. Vaya usted a saber si se trataba de un punto ciego de las cámaras de seguridad, o simplemente por cualquier otro motivo.
El caso es que no se percataron de que un espontáneo documentó la escena: un elemento propinaba manotazos y patadas contra un hombre tirado sobre la batea de la patrulla, ante la mirada impasible de sus compañeros.
Ninguno de los agresores -el documental no lo muestra- se opuso ni evitó la actitud del agresor. La inacción sin duda les vuelve cómplices.
En el gobierno municipal encabezado por Mario Alejandro Navarro Saldaña lo saben bien. Por ello un comunicado difundido la noche del domingo se deslinda del incidente. Informa de una indagatoria interna abierta ex profeso y del cese del ahora ex policía agresor.
Queda en evidencia la necesidad de reforzar el dominio de los protocolos de actuación, haciendo especial énfasis en que cualquier desviación no solo compromete la reputacion de la policía municipal de Guanajuato capital, sino que puede incurrir en responsabilidades administrativas e incluso penales.
Cabe esperar una actuación oportuna del ombudsman Vicente Esqueda. La Procuraudría de Derechos Humanos tiene material suficiente para iniciar de manera oficiosa un expediente.
Y el alcalde capitalino, Navarro Saldaña tiene ante sí la oportunidad de demostrar si su papel como responsable de los cuerpos de seguridad es asumido también en este tipo de incidentes inexcusables, o solo le da para lucirse en redes sociales ataviado con el uniforme policiaco en operativos nocturnos a modo, por no mencionar su viaje para atender el partido de futbol del León en una patrulla oficial.
Mario A. Arteaga
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Periodista de investigación. Ex servidor público de carrera
