Para nadie es desconocido que a este Gobierno le ha crecido la violencia en todo el país ha por qué no ha sido capaz de frenar ni contener al crimen organizado, que quiera o no, cada día le gana la batalla al propio régimen.
A pesar del esfuerzo que llevan a cabo las fuerzas castrenses y las directrices adoptadas por el secretario de Seguridad Pública Ciudadana, solamente se han logrado desmembrar algunas células inferiores de carteles que operan a sus anchas por toda la República.
Si bien es cierto que se han ejecutado acciones en contra del crimen organizado, la realidad arroja que no han sido tan efectivas dichas estrategias, porque incluso el último atentado del carro bomba ocurrido en la comunidad de Coahuayana, Michoacán el último sábado, demostró que no hay ninguna acción que prevenga la grave violencia.
Por eso en el discurso el sábado pasado durante el mitin convocado por Morena para la “celebración” de los siete años de haber asumido el poder, soslayan también muchos desaciertos que se han cometido en ese lapso.
Olvidan también apuntar que los conflictos de los trabajadores del campo, de los transportistas y de los tenedores del agua no fueron solucionados, a pesar de las protestas de los involucrados que se registraron en las principales carreteras de confluencia nacional.
Y es que para los morenistas, a partir del inicio de la administración encabezada por López Obrador, todos los errores cometidos por los regímenes que les antecedieron, son todavía responsabilidad de aquellos, ya que según los datos del ex mandatario tabasqueño, la culpa de todos los males que arrostramos los mexicanos aún es de sus antecesores.
Desde su perspectiva no existe ninguna responsabilidad de lo no hecho, omitido y hasta causado en estos últimos siete años de sus administraciones, ya que todo es menester de los gobiernos panistas y priistas. Ver para creer.
Habremos de esperar el inicio de 2026, que será el preámbulo a la elección del año siguiente, que como se sabe, volverá a elegirse la Cámara de Diputados en un esquema donde los desaciertos y las descalificaciones han sido parte de ese “desarrollo”, que cada día llena de decepción y de revanchismo a muchos millones de mexicanos, que esperan un milagro para recomponer la débil economía formal.
Habremos de esperar, -ya no con tanta esperanza- que este gobierno adquiera nuevos bríos y en verdad retome mejores proyectos que coadyuven a que la paz social que antes disfrutábamos, llegue por fin como una piedra de lanza a todos los rincones del país
Eso es lo que queremos y deseamos los más de 130 millones de mexicanos que somos en la actualidad, de volver a sentir esa paz duradera que nos hacía vislumbrar un México con muchas esperanzas de subsistencia, y que, en la actualidad para infortunio de todos, es sólo un espejismo.
Notas de Trascendencia
A partir de los pronunciamientos que surgieron en contra del diputado federal de Morena, Pedro Haces Barba, por los supuestos nexos que tiene con el aparente extorsionador Edgar Rodríguez Ortíz a) El Limones, detenido hace unos días en Durango, el también operador político de Morena en San Lázaro, negó vínculos con el propio Rodríguez Ortiz
El legislador federal reiteró que a pesar de que a El Limones lo ligan con su central obrera, la
CATEM, a lo que argumentó no tener vínculos con la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México, organización que dirige el diputado desde hace 15 años.
De su lado, el coordinador de bancada de Morena, Ricardo Monreal, respaldó al líder sindical y afirmó que él le cree. En conferencia de prensa, Monreal afirmó que Pedro Haces es un hombre honesto y un buen legislador, por lo que reafirmó que aquel no tiene un historial negativo y sí en cambio, propuestas y hechos que respaldan su quehacer político en favor de Morena y de los mexicanos en lo general.
En otro orden, la diputada federal Marybel Villegas Canché presentó una denuncia ante la Comisión de Honor y Justicia de Morena, por “una campaña sistemática de ataques, mentiras y difusión de noticias falsas en medios de comunicación y redes sociales”, la cual —afirmó— se ha mantenido durante más de cinco años con el objetivo de dañar su imagen y silenciar su labor política.
Villegas Canché sostuvo que detrás de esta estrategia hay intereses que han gastado millones de pesos en bots, linchamientos digitales y campañas de desprestigio, estimando un monto superior a los seis millones de pesos.
Señaló que estas acciones responden a que se ha negado a “servir a la mafia del poder” y ha denunciado abusos y atropellos en contra de la ciudadanía de Quintana Roo.
“Lo digo fuerte y claro: no me van a callar”, y subrayó que continuará con su trabajo por la transformación del estado y en defensa los derechos de la población, pese a la violencia mediática y política de la que asegura ser víctima.
