En materia de seguridad el gobernador de Coahuila está consciente de que no se puede cantar victoria ni bajar la guardia en ningún momento, a pesar de mantener a raya y fuera de la entidad a los grupos del crimen organizado y de ubicar a la entidad en el segundo lugar nacional.
Pero claro que se pueden presumir los resultados que “son claros y contundentes”, pues “la seguridad no se improvisa”, como lo dijo Manolo Jiménez Salinas este martes en Saltillo en la Sesión Ordinaria 33 del Consejo Estatal de Seguridad.
Ahí destacó también que “en Coahuila nada ni nadie por encima de la ley”.
Y es que hoy por hoy Coahuila es un referente nacional en el renglón de la seguridad, en el que se ubica abajo solo de Baja California Sur.
Jiménez Salinas insistió una vez más en los factores de voluntad, coordinación y trabajo en equipo entre los tres órdenes de gobierno como clave para lograr los resultados concretos que se han alcanzado. Jiménez Salinas también se refirió a esos factores la semana pasada en una reunión de mandatarios, la cual encabezó la presidenta Claudia Sheinbaum y a quien agradeció el respaldo recibido.
Por lo demás, el coahuilense, junto con su homólogo de Durango, Esteban Villegas, simplemente expresaron lo que todo el mundo sabía:
El presunto extorsionador Edgar Rodríguez, “El Limones”, acusado, además, de incurrir en golpizas, secuestros, cobros de piso y amenazas contra empresarios de La Laguna de Durango, principalmente agricultores y ganaderos, sí era parte de la central obrera Catem con el cargo de secretario de Organización en Durango, y no era posible que no lo conociera el líder nacional de esa Confederación, Pedro Haces Barba.
También es obvio y fácil de adivinar que Haces, sobre quien pesa un historial de robo de autos, extorsiones y portación de armas, según publicaciones periodísticas, recurrió a su amigo el también diputado federal Ricardo Monreal, para presionar al secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, quien insólitamente terminó deslindando al dirigente nacional de la Catem de los actos de extorsión cometidos por El Limones en La Laguna de Durango.
El mismo Haces ha quedado en evidencia al asegurar que no conoce a El Limones cuando videos, audios, fotografías y testimonios de sus víctimas dicen todo lo contrario.
Y ahora son los agricultores y ganaderos de Sinaloa los que se están quejando de extorsiones y señalan, por supuesto, a la Catem, central que agarró vuelo en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador.