No hay duda, el sector opositors pasa por su mejor momento. Y es que sin temor a un fraude electoral a los que es tan afecto, a estas alturas del proceso, incluso desde antes, pues ya se sabe quién va a ganar, incluso la señora del huipil sabe que va a ganar, y háganle como quieran. Es tan admirable el proceso, que a pesar de que todos los participantes tuvieron casi doscientos mil firmas cada uno, solo quedaron los que tenían que quedar (Lady X, Santi PRIL, la Paredes y Kike de la Madrid, lo cual era lógico porque todos ellos son más populares que Wendy Guevara y todos los de las Casa de los famosos) y pelusearon gachamente a los del PeRDeré de una manera casi nada mañosa, aunque parecía que todo había sido operado por mi Tantankita Córdova, Ciro Murayamasamí y que no te haga bobo Edmundo Jacobo.
Es una tristeza que Mancera, Preciado y Chiflano Aureoles digan que les robaron sus chingomil firmas y que todo esto es puro chanchullo.
Se me hace mala onda que duden de la certeza y legalidad de un proceso donde la mágica multiplicación de las firmas solo beneficie al PRIAN. Bueno, mientras Cabeza de Buey acepta el resultado, en espera de que le den un mendrugo de fuero, Chiflano Aureoles y Mancera ya quieren demandar al PRIANChu.
Pero lo que importa es ¡que nunca le quiten el celular a Vicente Vox! Dirán que el expresichente es un peligro para la ortografía, de la misma manera en que Xóchitl Gálvez es un peligro para las matemáticas, pero nos aporta harta diversión. En un afán por arremeter contra los libros de texto comunistas, que despertó el McCarthyismo de TV Azteca, Fox expresó en un tuit que el montaje de los libros de texto es peor que el montaje del caso Florence Cassez (¡tómala!), dejándole ir la lámina a Carlitos Loret, mejor conocido como Lord Montajes, apoyado por García Luna Productions. El viejo arte de escupir al cielo y salpicar a Loretito, pobrecito, instalado en el fanatismo anti AMLO para hacer cortinas de humo que lo alejen del espectro de Israel Vallarta.
Pobrecito también mi Claudio XXX que, a pesar de hacer todo un limpísimo proceso de casting y selección de personal, termine dándole la razón a López Obrador que desde el principio anunció que la elegida sería la señora X por buenaondita y más neoliberal que Gurría. No se vale.
Y sus intelecuales de la abajofirmancia nomás lo estorban. Igualito que los del Tribunal que, para censurar a AMLO, manipularon sus discursos para beneficiar a la de las gelatinas. Chale.
