En su mañanera de este viernes mencionó que el programa “Jóvenes construyendo el futuro” dispone de 900 mil aprendices que reciben 3 mil 600 pesos mensuales por capacitarse para un empleo. Una multiplicación sencilla nos dice que el programa del Presidente nos estaría costando ¡3 mil 240 millones de pesos cada mes!
Claro, habría que tener datos reales para llegar a conclusiones reales. Y nos acercaremos a ella pensando en reciente discurso de la secretaria del Trabajo, Luis María Alcalde. Para empezar, ella dijo que se han sumado al programa poco más de un millón de becarios, lo que significaría un costo aún mayor, de 3 mil 600 millones de pesos cada mes. ¡Aleluya!
Pero la misma funcionaria admitió que a diez meses de lanzado el programa, se ha contratado a 15 mil jóvenes (1.5 por ciento del total). Si bien es cierto que, como dijo, no ha terminado su capacitación, la verdad es que hay una distancia laaaarga entre 15 mil contratados y los 2.3 millones de jóvenes que el programa se estableció como meta.
Como muestra el mapa que la dependencia tiene en su sitio web, los estados que tienen más de 75 mil jóvenes contratados son la meta de López Obrador: Chiapas, Tabasco, Veracruz, el Estado de México.
Pero hay otros datos. Para empezar, Iván Flores y Miguel Székely, ambos del Centro de Estudios Educativos y Sociales, publicaron en Nexos una numeralia que prueba que el programa se sobredimensionó de origen: nunca llegarán a la meta de 2.3 millones de jóvenes porque los candidatos con disponibilidad son a lo sumo 1.5 millones, y de ellos parte tiene título y por tanto aspiraciones por encima de los 3 mil 600 al mes.
En agosto Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad tomó una muestra estadísticamente significativa de datos y los analizó, encontrando que lo que un comentario bienintencionado diría señalaría como grandísimas áreas de oportunidad, pero que un mexicano realista vería como lo que es: un programa opaco, mentiroso, inútil, mal diseñado y peor operado que es simplemente otro de los resumideros de dinero del Peje.
Hubo una réplica de la Secretaría del Trabajo a ese estudio, y a su vez recibió una respuesta de MCCI, planteando una serie de preguntas que no han tenido respuesta. Así que lo más probable es que los jóvenes sigan como antes, virtualmente sin un futuro. Pobre México.