El populismo contemporáneo emergió después de la segunda Guerra Mundial, pero los primeros antecedentes de populismo surgieron a fines del siglo XIX en Estados Unidos y Rusia.
Después de la Guerra de Secesión, Estados Unidos experimentó un proceso de industrialización relevante, la agricultura dejó de ser el principal soporte de la economía, le gente abandonó el medio rural para irse a la grandes urbes, miles de inmigrantes provenientes de Europa llegaron a buscar trabajo, desde ese tiempo Estados Unidos se consolidó como una tierra de oportunidades tanto para nacionales como extranjeros, pero el idilio estadounidense también tendría su lado opuesto, los ciudadanos se empezaron a sentir amenazados por la llegada de italianos e irlandeses, la industrialización fue vista por parte de los granjeros de mala manera ya que la mano de obra escaseaba debido a que la gente se iba a las ciudades, el gobierno empezó a concesionar tierras a extranjeros y los agricultores nativos empezaron a molestarse, a los bancos se les empezó a denostar como usureros debido a los altos intereses para dar créditos; esto fue fundamental para que líderes populistas emergieran.
Si bien los populistas no permearon en gran parte de la población estadounidense en ese entonces, si sentaron un precedente que permite visualizar de mejor manera el populismo en todo su contexto.
El populismo no tiene nacionalidad ni ideología, hay populismos de derecha como el caso de Estados Unidos, o de izquierda como en Venezuela.El líder populista cree realmente que es el salvador de la nación, que él reencarna los mejores valores de su pueblo y nación, como fue el caso de Hugo Chávez, en un discurso en 2012 exclamó ante sus simpatizantes la siguiente frase: ¡Chávez ya no soy yo, Chávez es el pueblo! Este tipo de ideas en las que el líder cree ser una deidad refleja claramente un patrón populista.
La democracia liberal está en crisis, los políticos deben replantearse que han hecho mal, siendo congruentes en lo que dicen con lo que hacen; se tienen que crearinstituciones fuertes, en el que el interés público deje de estar supeditado al interés privado, para que de esta manera exista un mayor empoderamiento al ciudadano, como dice Barack Obama en su libro, la audacia de la esperanza, en democracia el cargo más importante no es el político, el cargo más importante es el ciudadano.
