Política

Los que no votaran como nosotros

El voto en México es secreto, pero las simpatías por determinada agrupación política no se pueden ocultar durante nuestras pláticas con los demás, menos aán cuando mostramos imágenes al respecto o asistimos a eventos partidistas. Pocos los que aún se guardan su decisión y no lo dan a conocer, aunque para la manifestación de la marea rosa que habrá el domingo, quizá algunos saldrán del closet.

Es entonces que sabemos que en esta etapa de definición política que vivimos a punto de culminar, es que existe el voto diverso entre cercanos, que al darlo a conocer anticipadamente ha provocado dificultades entre familiares, amistades, vecinos, compañeros de trabajo, con aquellos que conforman nuestros circulo social. Por eso todos tenemos que aprender más para poder elegir este 2 de junio a quienes serán nuestros gobernantes, pero también sobre relaciones humanas para poder aplicar la tolerancia y respeto a pesar de preferencias que no coinciden con la nuestra.

Porque aún algunos mexicanos no salimos del asombro ni entendemos cómo es que a pesar de la educación que dimos, o que nos dieron, de la convivencia con nuestros allegados que apreciamos, piensen políticamente diferente a nosotros. Y aunque nos encontramos a quince días de que 99 millones vayamos a votar, después de casi nueve meses de campañas, seguimos sin explicaciones de cómo es que nuestros padres, hijos, hermanos o amigos no acepten nuestras elecciones políticas y traten de convencernos o sigan denostando nuestro parecer.

Es así que se está dando otro fenómeno de violencia entre la población y se refiere a la falta de aceptación por el voto que vamos a emitir. Se dice que si es distinto de la la mayoría o diverso, por eso no exista la unificación familiar de grupos sociales. El resultado lo hemos vivido o nos hemos dado cuenta; la discriminación, las discusiones, las etiquetas, el distanciamiento social y el sentirse fuera de lugar o tiempo.

Por supuesto dicha mención se refiere a ciudadanos que les importa mucho el resultado que tendrán las elecciones, ya que consideran que serán definitivas para el desarrollo de sus vidas, pero también para quienes el fanatismo los rige por simpatías partidistas de muchos años o por intereses personales al pertenecer a una agrupación que compite electoralmente

Es así que podemos afirmar que esto se da en las diferentes esferas sociales del país, pero que no generalizado, ya que existen ciudadanos que anteponen las buenas relaciones aun de cualquier diferencia.

Y aunque es cierto que ha crecido la conciencia política y sus resultados como son las votaciones. Igualmente hay indiferencia o poco interés y que por eso ha dado como resultado que en las últimas votaciones la participación ciudadana no sea mayor al 60% de la lista nominal.

Los que no votarán como nosotros, pueden ser todos o parte de nuestra familia, con los que convivimos a diario, aquellos que amamos, aquellos a quienes les hemos dado lo mejor de nosotros, aquellos que han sido incondicionales en nuestras vidas y eso es lo que realmente trasciende.

Votemos por los mismos de ahora, que según encuestas serán los triunfadores, por la oposición, que por eso está desesperada, por los que se dicen los nuevos, pero votemos por propia convicción e igualmente no olvidemos relacionarnos bien con los demás.


Google news logo
Síguenos en
Gemma Medina Aréchiga
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.