Algo muy profundo se tiene que haber dañado en el alma de un país para que existan atrocidades como los asesinatos de Fátima Cecilia Aldrighett y de Ingrid Escamilla. Para que el feminicidio sea una epidemia en México, donde en promedio 10 mujeres son asesinadas todos los días. Es el horror total.
El presidente Andrés Manuel López Obrador no ha podido o no ha querido entender la gravedad del reto que enfrenta su gobierno en materia de seguridad y contrario a la sensibilidad mostrada en su carácter de líder opositor, ya en el poder ha sido indiferente ante el dolor de las víctimas y de sus familiares. Ante la indignación y la urgencia que sentimos todos.
El crimen no es culpa del Presidente. Tampoco lo es la impunidad que promueve más delincuencia o la falta de capacidades en las policías y los ministerios públicos.
El Presidente no tiene la culpa de la descomposición social o del neoliberalismo al que señala como su principal causa.
De lo que sí es responsable el Presidente es de nuestra seguridad, de hecho, esta fue una de sus principales promesas de campaña y hasta hoy nos ha fallado olímpicamente. Ahí están las cifras, pero, sobre todo, ahí está el malestar social que se sigue acumulando.
Al presidente López Obrador le haría bien recordar que el margen de su victoria electoral y el de su popularidad como Presidente también se explica a partir del desgaste y el hartazgo de los mexicanos en asuntos como la corrupción y la violencia.
Al jefe del Ejecutivo federal le haría bien reflexionar sobre la insurrección feminista que valientemente le exige cuentas a funcionarios federales y locales que, con alguna modesta excepción, se han dedicado a replicar la frivolidad mostrada por el Presidente en este tema.
Algo muy profundo se ha dañado en el alma de nuestro país para que la violencia se ensañe con las niñas y las mujeres de México. La pregunta más importante que podemos hacernos sobre el brutal asesinato de Fátima Cecilia y todos los casos de feminicidio en México es: ¿por qué? ¿Por qué secuestran, violan, torturan y matan a nuestras mujeres en completa impunidad? ¿Por qué lo permitimos?
@Enrique_Acevedo
