Que el viernes la secretaria Anticorrupción y de Buen Gobierno, Raquel Buenrostro, estará en la conferencia de prensa mañanera para presentar un informe sobre los ventiladores médicos defectuosos que fueron adquiridos por el gobierno de México en el sexenio anterior y dará un balance sobre un grupo importante de farmacias que vende medicamentos del sector público, así como de la comercialización de los falsificados, temas que siguen en el aire pese a las advertencias y el ultimátum de la autoridad federal por incumplimientos de contrato.
Que mientras la broma en el Senado era que la buena noticia era que Gerardo Fernández Noroña ya se iba a Palestina y la mala que nomás por unos días, ayer se agitó el avispero con Adán Augusto López por el tema de sus cuentas pendientes con sospechas de corrupción en Tabasco, a lo que respondió que se trata de una “campañita” con trasfondo político, es decir, como ha dicho sobre el tema de La Barredora. En la Cámara de enfrente, Cuauhtémoc Blanco ahora sí asistió, pero no faltó quien antepuso que fue para no perderse el bailongo con la Sonora Santanera, a la que se homenajeó en San Lázaro.
Que la consejera presidenta del Instituto Electoral de la Ciudad de México, Patricia Avendaño, expuso en los foros de Gobernación que es un buen momento para que los nuevos derechos, como votos electrónico y anticipado para los paisanos en el extranjero, se apliquen en serio para todos, y advirtió que asignar a una sola autoridad la organización de los comicios generará sobrecarga de actividades y retrasos en momentos clave, lo que resultará en falta de legitimidad.
Que dicen que tuvo gran éxito la reunión de la presidenta Claudia Sheinbaum con Ben Horowitz, uno de los emprendedores estadunidenses más relevantes con la creación de grandes startups en el ecosistema de capital de riesgo y que ha diversificado sus proyectos en territorio nacional mediante fondos de inversión, amén de su producción de libros sobre la materia, como The Hard Thing About Hard Things y What You Do Is Who You Are.