Que nada puso tan jubiloso a Donald Trump, ni siquiera el anuncio de Irán convalidando el fin de la guerra con Israel, tal cual él dispuso, como el fallo del Tribunal Supremo de Estados Unidos que ratifica su orden ejecutiva para frenar parcialmente el otorgamiento de la ciudadanía a los recién nacidos hijos de migrantes sin documentos, pues argumenta que esa enmienda plasmada en la Constitución “es un fraude, una estafa”, habida cuenta de que “se pensó para los bebés de esclavos”. Y de ahí se pasó contra Canadá y después la Unión Europea y así el viernes del presidente de EU.
Que hablando de los vecinos, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que encabeza Scott Bessent, está trabajando en levantar alertas entre los propios bancos para impulsar la dinámica de fortalecimiento de medidas contra el lavado de dinero, porque fuentes cercanas a investigaciones aseguran que se ha detectado un patrón en el que empleados gerenciales son contactados de forma directa por los cárteles del narcotráfico para blanquear recursos y la situación pasa inadvertida para las financieras.
Que ante la imposibilidad de marchar este sábado en la Ciudad de México con la bandera del arcoíris y menos aún tener un carro alegórico, un grupo de senadores, encabezado por los morenistas Alejandra Arias, Reyna Celeste Ascencio, Martha Lucía Micher y Emmanuel Reyes, estará durante unos minutos en las escalinatas principales del Senado, sobre Paseo de la Reforma, para expresar su apoyo a la comunidad LBGT+ en la caminata del orgullo.
Que en el Partido Acción Nacional, que lidera Jorge Romero, dieron el banderazo de salida para la renovación de su dirigencia juvenil que, desde ya, pinta para ser una de las más cerradas. En este proceso compiten tres fórmulas encabezadas por Malinalli Pérez, Daniela Aguilar y Alberto Reyes, jóvenes formados en las filas blanquiazules que prometen regresar al partido a las calles para volver a ser opción para la ciudadanía, después de su debacle en las pasadas elecciones federales.
