Que el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, y el líder de la fracción de Morena, Ricardo Monreal, iniciaron sus cabildeos ante los parlamentos Centroamericano y Latinoamericano para convocar a un encuentro de legisladores de la región y fijar una posición común sobre las órdenes ejecutivas del presidente de EU, Donald Trump, particularmente las deportaciones masivas de migrantes y las amenazas de imponer aranceles a diversos países del continente, sobre todo después del zipizape con el mandatario colombiano, Gustavo Petro.
Que el grupo parlamentario de Morena en el Senado siempre sí hará reunión plenaria la próxima semana y, de acuerdo con su coordinador, Adán Augusto López, solo está cotejando las agendas de algunos de los secretarios de Estado que asistirán al encuentro con los legisladores. Hay que recordar que la semana pasada se informó que la bancada de la mayoría no tendría ninguna cita con el argumento de que ya sabía qué temas debería tratar, pero por lo visto le cambiaron la jugada.
Que la presidenta Claudia Sheinbaum analiza encabezar la conferencia mañanera del próximo 5 de febrero en Querétaro, entidad gobernada por el panista Mauricio Kuri, debido a que ese día se conmemora la promulgación de la Constitución de 1917. Por cierto, al acto están convocados los representantes de los tres Poderes de la Unión, entre ellos la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña. ¿Asistirá en medio de tantos desencuentros por la reforma judicial?
Que precisamente en la Suprema Corte, que encabeza Norma Piña, los servidores públicos se preguntan por qué los ministros no actuaron a tiempo para asumir las funciones del Comité de Investigación del Poder Judicial y elegir los mejores perfiles para los cargos de jueces, magistrados y ministros. Algunos creen que fue para demostrar su molestia por la reforma y no proceder contra los suyos, es decir, aquellos juzgadores de carrera que pidieron acatar fallos y que sus mandatos no fueron respetados.