Que con la reversa que metieron de última hora los patriarcas de ambas coaliciones en contienda, Morena por “Sigamos Haciendo Historia” y el PRI por “Fuerza y Corazón”, quedan intactos los acuerdos que inicialmente habían hecho con sus respectivos aliados, lo cual deja con su buena tajada a la chiquillada política PRD, PT, PVEM y NA.
Los peques ven pasar felizmente un periodo más de mero trámite para conservar sus prerrogativas, el dinero, vamos, que con el pretexto de actividades partidistas disfrutarán al menos otros tres años. Aún no transcurre la elección y los minipartidos ya ganaron.
Que esta vez fue la figura de candidatura común entre los partidos Morena-PT-PVEM en la que se anunció que tendría “ajustes” pero finalmente se desistieron, y la cosa se queda con 9 distritos y la repartición de los votos prácticamente igualitaria donde van juntos bajo esta figura. Sólo siguen vigentes los cambios para el convenio de coalición, pero bajo revisión del IEEM. A ver.
Que ayer el Partido Revolucionario Institucional arrancó con su proceso interno de selección para definir sus candidaturas con miras a la renovación de ayuntamientos y diputaciones locales. Hubo caras (muy) conocidas, pero entre lo destacable es que parecen haber metido paz en lo referente a Toluca y otros municipios cruciales. Ya se estará haciendo el respectivo análisis para que la clase política pueda cruzar apuestas en algunos escenarios que quizá se presenten cerrados.
Que ya es hasta tedioso aquello de los recuentos de la violencia en la entidad mexiquense, mientras las autoridades de Seguridad estatal siguen en sus laureles, echando por la borda los esfuerzos de la titular del Ejecutivo que se ha comprometido con este tema que lacera a la sociedad.
Por ejemplo este fin de semana, entre algunos otros casos, se registraron muertes presumiblemente a manos de la delincuencia en Ozumba, Valle de Chalco y Tenango del Aire. ¿Ya hay que irse acostumbrando?
