Que como se ha insistido, dos grandes frentes resultan urgentes en el Estado de México: el agua y la seguridad pública. Bien, pues justamente ayer la administración mexiquense hizo el uno-dos de manera efectiva. Empezando por la gobernadora Delfina Gómez, esbozando con su batuta las primeras fases de un plan integral para hacer frente a la crisis hídrica que está en puerta.
Ayer abordó, in situ, el tema de los humedales del Valle de Toluca, para los que proyecta una restauración, regeneración y renaturalización; también se propuso una mesa de trabajo para el seguimiento y atención a estos temas a fin de procurar soluciones en el corto, mediano y largo plazos.
Que para cerrar la pinza, Horacio Duarte, secretario General de Gobierno, acudió al “tranquilo” municipio de Ecatepec para inaugurar la Feria de Paz, que precisamente para afrontar la incidencia delictiva regional desde la raíz pretende atender zonas en los que los crímenes se han remarcado de manera notable. La idea es hacer un análisis directo para que la población plantee sus necesidades y se les alleguen programas que mejoren su calidad de vida e, indirectamente, alejen a las familias de involucrarse en temas fuera de la ley. El enfoque es positivo.
A propósito, para quienes no notaron el evidente detalle, en este evento de importante magnitud naturalmente acudieron varios personajes del ámbito estatal. Entre otros, Karina Labastida, Directora del DIFEM; Mónica Chávez, Secretaria de las Mujeres; Nelly Carrasco, de Cultura y Turismo y Miguel Ángel Hernández, de Educación. Pero no, la diputada local con epicentro en Ecatepec no estuvo presente. Todo tiene lectura política.
Que por cierto, mientras lo gubernamental transcurre, lo electoral sigue en primera línea. Los más colmilludos de la grilla estatal ven a la nueva aplanadora operando a todo motor y, sudando, la oposición observa que además del arrastre morenista que la presidencial va a generar, en la entidad se comienzan a anunciar pagos adelantados de los programas sociales. Se otorgarán montos importantes antes de que las campañas inicien y, sin el mínimo rasguño a la ley, seguro impactarán en el ánimo y la decisión popular. Al tiempo.
