QUE en esta última semana de mandato del gobernador Alfredo Del Mazo Maza, provocan mucha expectativa las declaraciones del dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, quien señala que una vez que deje el cargo iniciará un proceso partidista en su contra por presuntamente haber dejado ir el control de la entidad más importante, política y económicamente hablando, a la 4T.
Lo cierto es que también existe un amplio sector del priismo que se encuentra sumamente contrariado con el liderazgo nacional y lo incluye en la culpa de la debacle.
QUE a pesar de las yuxtaposiciones políticas, el aparato gubernamental mexiquense se encuentra trabajando al tope para la entrega-recepción que legitimará la alternancia en el poder en el Estado de México, con la presencia, de nuevo, de Andrés Manuel López Obrador en la inauguración del Tren Interurbano México-Toluca y la asunción al poder de la profesora Delfina Gómez.
QUE los que se siguen frotando las manos por la operación del Tren Interurbano son los empresarios transportistas foráneos agrupados en la Canapat, encabezados por Odilón López Nava, quien al parecer ya tiene bien estructurado el esquema de empresas que se van a repartir el pastel de la movilidad aledaña en los puntos de recorrido del “Insurgente” y que les dejará muy jugosos dividendos.
Se espera que al menos el propio López Nava implemente la misma retórica de ir “en contra” de los taxis piratas, el ambulantaje, inseguridad, etcétera, con lo que ha machacado los últimos 15 años sin aportar soluciones prácticas y reales en la zona Terminal-Mercado Juárez.