Que nos llega el rumor que hay quien piensa que el alcalde electo de Celaya, Juan Miguel Ramírez, llega con compromisos non sanctos detrás de sus intenciones de “limpiar” a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, pues para nadie es desconocido que se quiere deshacer de todos aquellos elementos que eran parte de la Policía Federal, de entrada, cuando ellos son precisamente los que le han hecho frente a la delincuencia organizada.
Nos dicen que el alcalde electo se la ha pasado haciendo comentarios de manera irresponsable que ya han puesto en la mira de los delincuentes a funcionarios no solo del municipio sino también del gobierno del estado, asunto que ya empieza a preocupar a propios y extraños. Mientras, fantasea con que le enviarán 200 marinos a cambio de correr a los ex policías federales.
Que de nuevo la gran incógnita respecto a la seguridad es el nombramiento de los titulares de seguridad en los municipios, recordemos que Morena gobernará 13, la mayoría de ellos en la zona caliente del estado, así que tendrán que apostar por quienes han funcionado al frente de las policías municipales o buscar cuadros inexistentes en su partido.
El tema es que para nadie es desconocido que nada tiene que ver con partidos políticos y sí con presidentes municipales, al menos por omisión, que quienes se encargan de la seguridad terminan “recomendados” por criminales, para que cuando menos los dejen trabajar a sus anchas y ejemplos sobran.
Que mandan mensaje a los acelerados que dicen que ya se retrasó la develación de los nombres de quienes integrarán el gabinete de Libia García, pues el misterio será revelado en el mes de agosto, aproximadamente un mes antes de que la gobernadora electa rinda protesta como titular del Ejecutivo.
Nos cuentan que no hay prisa pues Libia prefiere un análisis concienzudo de quienes deberán llegar, o repetir, así que las novedades empezarán a conocerse la próxima semana justo el primero de agosto cuando inicie el proceso de transición.
