El Norte de Veracruz, ese pueblo tan castigado históricamente por sus gobernantes, tan discriminado por los políticos de todos los colores, tan lastimado por la inseguridad y ahora hasta la naturaleza se vino a ensañar con esta región
Lo ocurrido duele muchísimo y aún hoy todavía no se dimensiona el tamaño de la tragedia. La más dolorosa que se recuerde en Veracruz.
Es una región revictimizada, donde el desastre lo mismo sorprendió a pobres que a ricos. El rostro de la muerte no discriminó edades, y hoy las familias lloran la pérdida y la desaparición de un ser querido, porque lo material se recupera, pero las vidas no.
“Nuestros compañeros desaparecidos no son números”, dijeron los universitarios en medio de su dolor. Es desgarrador cómo miles de familias perdieron casa y sustento de la noche a la mañana.
El agua se llevó a su gente y a sus bienes, pero más que el agua fue la indiferencia oficial. Estas consecuencias fatales tienen detrás una negligencia, una omisión y una responsabilidad.
Perdieron más que pertenencias, perdieron su paz, su esperanza, y el derecho a vivir en condiciones de normalidad. Lo único que no han perdido es su dignidad y esa los mantiene de pie y les dará la fuerza necesaria para levantarse.
La devastación conmovió al mundo y todavía hay familias sin poder despedir dignamente a sus seres queridos que se fueron. Y la cifra de muertes y desapariciones no se ha cerrado.
También hay héroes, como Don Chuy, el trabajador de Pemex que activó la alarma de emergencia la madrugada en que el río Cazones superó sus niveles históricos. Gracias a él, muchas familias en zonas bajas se despertaron a tiempo para evacuar, lo que mitigó el impacto.
Otro héroe es el policía que murió tratando de salvar vidas y los soldados que han trabajado de forma extraordinaria. Sin excluir a la propia ciudadanía que se ha solidarizado con otros aún en medio de su propia adversidad.
El Norte de Veracruz resiste entre agua y lodo, este desastre tan crudo que hasta ahora ha dejado 29 personas fallecidas y 18 más no localizadas. No fue solo Poza Rica y Álamo, son 40 los municipios afectados, entre ellos Pánuco, y 22 de atención prioritaria, como también Tempoal, El Higo, Platón Sánchez, Chalma y Tantoyuca.