La elección de 2024, elegirá Presidente de la República y renovará la totalidad de los diputados federales y senadores. Nueve entidades federativas votarán gobernador: Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz, Yucatán y Ciudad de México. En 31 de entidades federativas (con excepción de Coahuila) renuevan su congreso local. Es decir, más de 20 mil cargos estarán en juego. Señalo comentarios puntuales.
1. Colapso de los calendarios electorales. Para empezar las campañas, no empezaron este 1 de marzo sino desde el otoño de 2023. El calendario y parte de la normatividad propuestas por la reforma del 2014 resultan no solo obsoletas sino una burla. Todos lo han violado hasta las propias autoridades electorales.
2. Preferencias electorales sin cambios. En casi 4 meses, las tendencias de las encuestas no han cambiado. A la cabeza y con amplia ventaja, la detentan Claudia Sheinbaum Pardo y Morena. La oposición, aún no ha mostrado un proyecto de país.
3. Guerra sucia. De nuevo aparecen las denostaciones y ataques descabellados contra candidatos. Se utilizan granjas de bots, uso de IA y campañas escabrosas. Se juega con fuego.
4. Estructuras electorales cuarteadas. Hay una lucha de poder en diversas estructuras claves que conducen y arbitran el proceso electoral 2024. En el INE la nueva presidenta Guadalupe Taddei, mantiene una batalla feroz contra la línea Cordovista enquistada en todas las áreas del instituto. El Tribunal Electoral (TEPJF) hay una lucha intensa por el control y representatividad. El IEEM enfrenta una crisis de egos que toda la clase política mexiquense conoce bien. Preocupa que las divisiones se puedan transformar en vulnerabilidades que afecten su correcto desempeño.
5. El proceso electoral será el más caro de la historia. Sin contar con costos de guardia, vigilancia policial y resguardo de traslado de paquetes electorales. Los gastos contemplan una inversión de más de 80 mil millones de pesos. Incluye al Instituto Nacional Electoral (INE), el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), los Tribunales locales; el costo de los OPLES, así como el financiamiento de partidos a nivel federal.
6. Elecciones violentas. Diversos especialistas están alertando sobre la aspiración del crimen organizado por controlar contiendas electorales. Según El País, al menos 33 actores vinculados a los procesos electorales, han sido asesinados en los últimos 2 meses del año. Las estadísticas han empezado a prender alertas.
La democracia no está garantizada con el voto, requiere una clase política e instituciones leales y sólidas.