Vamos a ver si nos entendemos. En este momento hay dos choques de fuerzas.
El primero es el de las series que, de origen, se hacen para la televisión tradicional y el de las series que, desde su concepción, se hacen para el “streaming”.
El segundo es el de las series británicas y el de las series estadounidenses.
Las series que, de origen, se hacen para la televisión de antes suelen ser mejores porque nacieron para competir, para subir el “rating”, para retener al público.
Las series británicas tienden a ser mejores que las estadounidenses porque, como están pagadas por el erario, no se pueden dar el lujo ni de fallar ni de no ofrecer los mejores libretos, las mejores actuaciones y los mejores valores de producción.
Por eso tienen muy pocos capítulos por temporada. Por eso a los estadounidenses les encanta coproducir con ellos.
¿Por qué le estoy explicando esto? Porque le tengo una magnífica noticia: hoy viernes 7 de abril se estrena en Lionsgate+ la temporada dos de “The Capture” (“La captura”), una serie que reúne lo más maravilloso de las series hechas para la televisión tradicional con lo más fantástico de las series inglesas.
Sí, ya sé lo que está pensando: “¿Y a mí qué? Ni soy suscriptor de Lionsgate+ ni vi la temporada uno de “The Capture”.
Mire, si no es suscriptor, no sufra. Usted sabe que siempre existen los períodos de pruebas.
Y si no vio el inicio de este monumento de serie, ni se agobie. La primera temporada sólo tiene seis episodios. Es el maratón perfecto. ¡Véalo!
No le voy a contar detalles para no arruinarle la experiencia, pero déjeme le cuento para que entienda:
“The Capture” es una serie que narra las cosas más emocionantes que usted se pueda imaginar alrededor de lo que captan las cámaras de seguridad que existen en todas las esquinas de lugares como Londres y la Ciudad de México.
Imagínese usted que así como esas cámaras captan un choque, de repente registran algo muy feo como un atentado terrorista, una violación o un feminicidio.
Hasta aquí no hay nada de especial, ¿verdad? Las autoridades registran y la policía se mueve. Hay pruebas de todo.
¿Pero qué pasa cuando esas cámaras no captan la verdad? ¿Qué pasa cuando las cámaras capturan algo que no coincide con lo que sucedió?
¡Órale! Aquí estamos hablando de locura, de inteligencia artificial, de cosas delicadísimas que la televisión británica ya se está atreviendo a poner en pantalla. ¿Ahora entiende la magnitud de serie de la que le estoy hablando?
¿Cuál es la nota? Que “The Capture” regresa mejor que nunca, que la temporada dos es mejor que la uno.
Le recuerdo: “The Capture” nació antes de la pandemia, el COVID-19 la interrumpió, ahora está de vuelta, obviamente sus responsables no la iban a dejar caer y menos con todo lo que ha pasado, con todos los recursos tecnológicos que los delincuentes tienen ahora para hacer el mal.
Por si esto no fuera lo suficientemente convincente, el reparto de este concepto está encabezado por pura superestrella como Holiday Grainger (“Cenicienta”), Ben Miles (“Andor”), Ron Perlman (“Hellboy”), Indira Varma (“Game of Thrones”) y Lia Williamson (“The Crown”), por mencionar sólo a unas cuantas.
¿Se la va a perder? No, por favor. Luche por ver lo nuevo de “The Capture” en Liongate+. Le va a gustar. De veras que sí.
