En México hemos hecho series de todo tipo: románticas, cómicas, infantiles, de denuncia, de terror. Somos una potencia. No nos podemos quejar.
Pero hay algo que siempre aparece cuando la gente se queja en las redes sociales: no nos salen “bien” las series de acción.
Será un problema cultural, económico o quién sabe de qué pero como que ahí hay un pendiente.
Bueno, ¡pues qué cree! Hoy podemos decir: ¡Prueba superada! Hoy martes 13 de marzo se estrena en Netflix una joyita titulada “Bandidos” que es exactamente la respuesta a esas inquietudes.
Y para que quede claro el nivel, una de sus protagonistas es la mismísima Mabel Cadena, la mega-actriz que dejó a todos con la boca abierta en “Black Panther: Wakanda Forever”.
Evidentemente Mabel no iba a retroceder en su carrera aceptando cualquier cosa.
“Bandidos” tiene exactamente esas escenas de acción que las multitudes de las redes sociales estaban esperando para relamerse los bigotes de placer.
No, pero espérese, yo necesitaría otras dos columnas para medio abarcar todo lo que hay aquí. La riqueza periodística de este concepto es inconmensurable.
Trataré de ser breve pero sí écheme la mano y véala. ¿En qué piensan la mayoría de los extranjeros cuando piensan en México? En nuestras playas, en nuestras ruinas arqueológicas, en nuestros maravillosos destinos turísticos.
“Bandidos” es tan, tan, pero tan sabia que parte de eso y, por lo mismo, enloquecerá a las mujeres y a los hombres de Estados Unidos, de Europa, de Asia y, por supuesto, del resto de Iberoamérica.
Es la historia de unos estafadores mucho muy divertidos, mucho muy bien justificados para que aquello no parezca una apología del delito, que viven cualquier cantidad de odiseas a partir de un enredo de hotel.
No le voy a contar más para no ofender su inteligencia pero le garantizo que cuando vea completo el episodio uno pasará inmediatamente al dos y así hasta devorarlos todos porque esto está escrito 100 por ciento para el ideal de consumo de Netflix por Pablo Tébar (“Diablero”).
Dirige Adrián Grunberg, un hombre con toda la experiencia de “Rambo, Last Blood”, “Apocalypto” y “Vacaciones en el infierno” con Mel Gibson. O sea, sí le sabe al cine de acción calidad global.
La casa productora es, “humildemente”, Redrum. La de “Bardo”, “A millones de kilómetros”, “Godzila, King of The Monsters” y “Wonder Woman 1984”.
¿Cómo quiere que le explique que esto es bueno? ¿Cómo le hago para acabar con los prejuicios de tantísimas personas que no ven nada pero que todo lo mexicano lo califican mal entre memes e insultos?
Tuve el privilegio de ver los primeros capítulos de esta emisión y no tiene una idea de lo mucho que me divertí, de lo bien que me la pasé y de lo mucho que admiré a sus estrellas.
Siempre he sido fan de Alfonso Dosal. Hoy, lo venero. Ester Expósito, mi vida, está regia. Juan Pablo Medina me dejó como estúpido porque aquí la hace de “jubilado”.
Pero Bruno Bichir no canta mal las rancheras. Jamás lo había visto así. Y mire que el señor es grande.
No, no lo voy a saturar de elogios pero yo tendría que ser el peor periodista de México si no me detuviera a aplaudirle a Adrián Ladrón.
Lo he visto en puras cosas buenas. ¡Hasta en teatro! No por nada se ganó el Ariel. Usted nomás mírelo y me dice.
Esto tiene todo para ser un cañonazo internacional, una locura. Nunca más me vuelvan a decir que en México no sabemos hacer cine de acción.
Luche con todas sus fuerzas por ver “Bandidos” en Netflix. Le va a gustar. De veras que sí.
