“Los entrenadores podemos cometer dos pecados: hacer caminar a jugadores que vuelan o pretender que vuelan los que sólo pueden caminar”. Marcelo Bielsa
Unos llegan y otros se van, y ante la escasez de directores técnicos en la actualidad Jaime Jimmy Lozano hizo su debut el pasado fin de semana donde a pocos días de haberse presentado con el Necaxa puso orden y le cambió la cara al equipo que vaticinaba una terrible temporada.
Y es que es de congratularse que hombres como Jaime Lozano tengan un voto de confianza en nuestro futbol y no se pierdan en la directriz de la mediocridad financiera de muchos equipos. Y es que al Jimmy le auguramos un gran futuro después de lo conseguido con la selección olímpica.
Bienvenidos sean los Lozano en nuestra liga y ojalá muy pronto se rescate el talento de hombres como el Potro Gutiérrez para que los equipos de primera división se den cuenta de la capacidad que existe en este tipo de entrenadores y puedan refrescar el futbol con otro tipo de metodología y mentalidad y no con entrenadores que vienen del extranjero con un aparente cartel, para brindarnos más de lo mismo bajo un timorato argumento de tenerse que adaptar al futbol mexicano.
Que vengan más hombres de capacidad como los Larcamón, los Reynoso, los Cocca pero también que den oportunidad a gente que se ha ganado a pulso su lugar en nuestro futbol como lo ha sido Jaime Lozano, Nacho Ambriz, los Herrera y se rescate el talento de hombres como Gutiérrez o Tena.
A nuestro futbol le urge refrescarse y reinventarse y no solo dejarnos llevar por los discursos de entrenadores que semana a semana dan de qué hablar por lo que dicen o hace en las conferencias de prensa, para dar la nota y dejan de hacer su trabajo en donde importa; en la cancha, acompañando al jugador para no convertirse en solapadores de sus eternos errores.
Basta de los entrenadores mezquinos que buscan no perder la chamba y solo cuidan el resultado para escudarse torneo tras torneo en la idea de que cuentan con planteles cortos o limitados o que tuvieron un sinfín de circunstancias que les impidieron desplegar un buen futbol. ¿Y qué decir de esos entrenadores que buscan el protagonismo y los reflectores?, donde solo le dan atole con el dedo a sus directivos y a sus aficionados que pagan por un boleto para recibir migajas de buen futbol.
Ojalá que los directivos del futbol mexicano comprendan que hay modelos que ya son obsoletos y que no pueden basar su modelo de juego en “resultadistas” a cambio de la pobreza con la que están alimentando nuestro futbol, y sino para muestra un botón, con nuestra selección nacional donde a más de uno lo tienen con el “Jesús en la boca” implorando que se gane el próximo partido contra Estados Unidos.
En fin, dicen que una liga es el reflejo de sus entrenadores y nuestra liga créanme no vive su mejor momento.
Hasta la próxima…
Por: Alberto Romero Rodríguez
Cuenta; ManchonPenal
@AlbertoRomeroMP
