Por: Paloma Villagómez Ornelas
Ilustración: Patricio Betteo
Si bien el país ha ido recuperando gradualmente los empleos perdidos por la pandemia, entre el primer trimestre de 2020 y el primero de 2021, la pobreza laboral en México aumentó de 35 % a 39 %; es decir, cuatro de cada diez personas perciben ingresos por trabajo menores al costo de la canasta alimentaria básica. Durante este mismo periodo, la inflación ha alcanzado niveles superiores al 7 %, afectando de manera particular el costo de los alimentos básicos y los combustibles para la cocina y el transporte de personas y alimentos. Si consideramos el confinamiento, el estancamiento económico, la enfermedad y muerte que ha traído la pandemia, se esperaría que la capacidad de las personas para alimentarse se hubiese visto severamente afectada respecto a los años anteriores y que el impacto fuese más fuerte entre quienes ya eran vulnerables a esta situación.