El turismo de negocios enfrenta una desaceleración ante la incertidumbre económica derivada de la política arancelaria del presidente estadunidense, Donald Trump; a ello se suman las tensiones por la renegociación del tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la caída de las reservas petroleras, factores que comienzan a afectar los flujos de inversión y movilidad corporativa en la región.
En entrevista con MILENIO, el vicepresidente de operaciones de la empresa hotelera Posadas, Enrique Calderón, contó: "en los destinos de playa donde operamos se ha mantenido un crecimiento en reservas, pero lo que sí hemos visto es una baja de aproximadamente 5 por ciento en viajeros de negocios. En general, en todas las ciudades de México, si hay un descenso en este segmento del sector".
El directivo especificó que uno de los principales motivos de este escenario negativo es la incertidumbre generada por los aranceles del gobierno estadunidense.
"La amenaza de que puedan afectar (los gravámenes) es lo que ha deprimido un poco la inversión en las plantas automotrices en México y con ello se han visto reducidos los viajes", puntualizó.
Señaló que en la parte del petróleo, la baja de las reservas de este sector en México ha disminuido también los proyectos en la zona petrolera.
"Ha sido una mezcla de varios factores lo que ha generado esta menor actividad en el turismo de negocios en lo que va del año", añadió Enrique Calderón.
Y refrendó que otro aspecto que ha perjudicado el flujo son las negociaciones sobre el T-MEC, donde se habla de nuevos impuestos y otros aspectos, lo cual ha generado que los empresarios mantengan una calma en sus decisiones de invertir.
“Hay noticias muy volátiles y eso ha mantenido en calma que la gente haya tomado decisiones sobre lo que sucederá en adelante”, sostuvo.
El vicepresidente de operaciones de Posadas estimó que será para el segundo semestre del próximo año cuando el turismo de negocios pueda recuperarse y con ello empezar a registrar crecimientos en su actividad.
MRA
