Pese a que Estados Unidos perfila un gravamen del uno por ciento a las remesas dentro de su plan fiscal, la Secretaría de Economía estatal descartó que esto vaya a afectar a Nuevo León, al advertir que la entidad no depende de esta situación.
En entrevista, Emmanuel Loo, subsecretario de Economía en Nuevo León, sostuvo que en 2024 al estado ingresó apenas el 2.1 por ciento de los 64 mil 746 millones de dólares en remesas que entraron a nivel nacional.
“Nuevo León es un estado que tiene una economía muy diversa y no nos va a afectar el tema del impuesto en la remesa, porque no somos un estado dependiente de las remesas, tenemos muy bajo porcentaje del PIB que menos del uno por ciento del PIB son las remesas”.
“Entonces la verdad es que ese uno por ciento impactará a estados como Michoacán, Jalisco, Zacatecas, Guanajuato, que son estados que son altamente remesadores”, dijo.
Además, resaltó que el porcentaje de ingreso de remesas en Nuevo León ha ido a la baja en los últimos años.
“No somos un estado remesador y también al estar tan cerca de Estados Unidos, pues la gente no manda el dinero por los métodos tradicionales de remesas: conocen a un familiar que va y viene y le dan el dinero, entonces eso como que no nos afecta tanto”, indicó.
Por último, en caso de que se concrete el uno por ciento al impuesto en las remesas, adelantó que en Nuevo León el tema solamente se mantendría.
“Yo creo que se va a quedar igual porque, al final, volvemos a lo mismo: la gente termina mandando el mismo dinero y con este uno por ciento, si mandaba 350, va a mandar 35 más para seguir mandando los mismos 350 dólares”, concluyó.
El mercado laboral norteamericano y su impacto
El banco Base señaló que el mercado laboral de Estados Unidos sigue mostrando señales de enfriamiento y la actividad económica se ha debilitado, por lo que ambas variables impactaron en el crecimiento de las remesas.
Gabriela Siller, directora del área de análisis económico-financiero, explicó que las remesas se han visto afectadas en parte por el temor de la población indocumentada a ser deportada.
“Con todas las deportaciones masivas y redadas, los migrantes que están en Estados Unidos tienen miedo de salir ante la posibilidad de ser deportados. Con todo esto se espera que las remesas muestren en este año una caída de 1.5 por ciento, que sería la primera caída desde el 2013”.
“Son dos factores: uno, el deterioro del mercado laboral particularmente entre los latinos-hispanos en Estados Unidos y la creación de empleo entre latinos-hispanos en lo que va del año ha sido 70 por ciento menor a la del año pasado”, detalló Siller en entrevista.