Aunque la industria refresquera alcanzó un acuerdo con el gobierno mexicano para regular los incrementos del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), Coca-Cola anticipa que la medida tendrá repercusiones en sus operaciones en México.
En su llamada con accionistas con motivo de los resultados del tercer trimestre de 2025, la empresa explicó que ya están trabajando con sus embotelladores para adaptarse a los cambios.
"En lo que respecta al impuesto de México, que creo que se aprobó hace un par de días, sí, es un aumento significativo. Estamos trabajando con el sistema de embotellado para ver cómo nos adaptamos a estos aumentos que entrarán en vigor el 1 de enero de 2026", dijo el director ejecutivo de la compañía, James Quincey.
Es probable que haya algún impacto al principio, y luego, a medida que usemos toda la implementación, nos recuperaremos de eso. Pero sí, esperamos que llegue a principios del próximo año", agregó.
Recordó que en 2014 ya se adaptaron a un impuesto similar redoblando su apuesta en marketing e innovación, además de utilizar tecnología RGM y la ejecución del sistema de embotellado.
En cuanto a bebidas, agregó que Santa Clara, en México, creció 13 por ciento en volumen en el tercer trimestre y se convirtió en la marca de lácteos de valor agregado número uno en el país
Mientras que, en general, en Norteamérica, obtuvieron sólidos resultados a pesar de las diferencias continuas en el gasto entre los grupos de ingresos y el tráfico más lento en todos los canales.
El directivo explicó que el volumen se mantuvo estable y mejoró secuencialmente. También ganaron participación en valor y tuvieron un fuerte crecimiento de los ingresos y las ganancias.
La compañía agregó que en la región están invirtiendo en fortalecer su catálogo de Coca-Cola Zero Azúcar y Coca-Cola Light que tuvo un fuerte crecimiento de volumen al llegar a una nueva generación de consumidores con campañas como Know the Signs, que invita a los bebedores a tomar un descanso de Coca-Cola.
MRA