"¿Qué vas a ser cuando seas grande?", dice una conocida canción del cantante argentino Miguel Mateos. Y con razón, pues esa es la pregunta que se hacen miles de jóvenes mexicanos: este año, entre 50,000 y 100,000 estudiantes de bachillerato están buscando un lugar en la universidad, de acuerdo con estimaciones de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior.
Nos encontramos en un momento en el que estudiar una licenciatura en México es un privilegio reservado para cada vez menos personas, pues si bien la matricula creció ligeramente en los últimos años (de 21 a 28% entre 2000 y 2013, según el Banco Mundial), esto va de la mano con un incremento exponencial en la demanda de los jóvenes que quieren ingresar a una carrera.
La situación es más desalentadora porque muchos de estos futuros profesionistas se arrepienten de la decisión que tomaron: según un reporte del Instituto de Investigación en Psicología Clínica Social y la organización Vocación Central, hasta 40% de los jóvenes mexicanos se equivoca al elegir una licenciatura por responder a presiones familiares, mientras que 85% de quienes ingresan a estudios superiores desconoce cómo será la vida laboral en su profesión.
El problema de las empresas para encontrar el talento requerido en los nuevos puestos de trabajo que surgen en la era de las tecnologías de la información, ha sido abordado por empresas como Manpower, dedicadas a ofrecer soluciones en materia de capital humano, y por el propio Banco Mundial, que llamó a fortalecer los planes de estudio de licenciatura en México para que concuerden con lo que requiere el mercado laboral.
Sin embargo, no todo son malas noticias para quienes van a elegir lo que quieren ser de grandes o para los que ya están en la universidad: en sus manos está comenzar a prepararse desde ahora para los retos del futuro. Fidel Arroyo, director de Ventas de Manpower, les recomienda ganar experiencia laboral mientras estudian (porque no todas las habilidades vocacionales se aprenden en las aulas). Es crucial, también, aprender nuevas habilidades y ser flexibles para moverse a posiciones que les eviten caer en zonas de confort.
Para que tomen nota y se vayan preparando, en 2020 algunas de las habilidades más requeridas por las empresas, según el Foro Económico Mundial, serán: resolución de problemas complejos; pensamiento crítico; creatividad; gestión de personas; inteligencia emocional; juicio y toma de decisiones; negociación y flexibilidad cognitiva.