El ministro de Cultura de España, Ernest Urtasun, declaró en Madrid que “no debemos tener miedo a la palabra perdón”, al inaugurar la exposición La mitad del mundo. La mujer en el México indígena, que se exhibe en el Museo Arqueológico Nacional (MAN), a la que calificó como “un proyecto cultural que ha permitido un acercamiento político necesario entre nuestros países”.
“No le debemos tener ningún miedo a las palabras que nos unen y nos aproximan, en tanto países y personas. Palabras como diálogo, como perdón, encuentro, fraternidad. Porque todas esas palabras nos acercan y mejoran nuestras vidas. Y todas ellas constituyen el campo semántico de la cultura, que es ese terreno fértil donde siempre se anuncian los cambios y las transformaciones”, afirmó el ministro.
Así, Urtasun retomó las palabras de desagravio que pronunció José Manuel Albares, ministro español de Exteriores, a finales de octubre en la inauguración de otras de las exposiciones que forman parte de la muestra y que se exhibe en el Instituto Cervantes.
En aquella ocasión, Albares se refirió a “la historia compartida entre España y México, como toda historia humana, tiene claroscuros. Ha habido dolor e injusticia hacia los pueblos originarios. Hubo injusticia, justo es reconocerlo y lamentarlo. Esa es parte de nuestra historia compartida, no podemos negarla ni olvidarla”. Con este discurso, el gobierno socialista de Pedro Sánchez respondía a la petición de perdón durante el mandato de Andrés Manuel López Obrador por los abusos cometidos por los españoles durante la Conquista, hace 500 años.
Un mes después, Urtasun se volvió a referir al tema y añadió que “hablar de descolonización de discursos, relatos históricos y museográficos, tiene que ver justamente con esa tarea, la de la responsabilidad, la atención, el respeto y el acercamiento verdadero a realidades que han sido silenciadas, vulneradas o directamente ignoradas durante demasiado tiempo”.
“Esa es la función de las instituciones culturales y es ahí donde se inscribe también el trabajo del Ministerio de Cultura. Como saben el pasado 19 de noviembre presentamos las nuevas museografías de los Museos de Antropología y de América, respetuosas con los pueblos originarios, basadas en el criterio experto y que nos permitirán continuar ahondando en un diálogo y un acercamiento ya iniciado”, continuó.
“Por eso esta exposición es algo más que una recopilación material. Es en sí misma un acto de reconocimiento, con el que devolvemos a culturas, saberes e identidades injustamente relegadas su lugar de centralidad. Un reconocimiento profundo, verdadero, que no evita señalar responsabilidades en la perpetuación histórica de esas desigualdades”, afirmó.
Señaló que “como ministro de Cultura del Gobierno de España, pero también como diplomático, soy un convencido del valor y del efecto de la diplomacia cultural. Lo demostramos conjuntamente en Mondiacult, la cumbre de la Unesco que celebramos hace unos meses en Barcelona y en la que México tuvo un destacado protagonismo”.
Indicó que la muestra tiene como “sustrato importantísimo reforzar los vínculos entre nuestros países y hacer posible que nos demos un abrazo a través de la cultura”. Dijo que para la muestra se reunieron tres importantes sedes españolas, además del MAN, como son el Museo Thyssen, el Instituto Cervantes y Casa de México, que son las otras sedes del serial.
“Eso significa que México ha conseguido unir a cuatro grandes instituciones españolas en un proyecto común, y ese es en sí mismo un mensaje de singular relevancia”, reconoció.
En lo que respecta a lo que se exhibe en el MAN, El ámbito humano, el objetivo es reivindicar la esfera cotidiana asociada a la mujer y mostrar cómo las mujeres asumieron funciones esenciales como la educación, los cuidados, la elaboración de textiles y cerámica, la preparación de alimentos o la transmisión de conocimiento ritual y comunitario. Y cómo estas actividades cohesionaron socialmente. Se exponen casi 250 piezas y algunas de las cuales salen de México por primera vez.
A la inauguración del evento también asistió, entre otros, Quirino Ordaz, quien subrayó que la exposición “es otra oportunidad para compartir la grandeza de los pueblos originarios y la riqueza del legado de las mujeres. Hay que edificar desde el respeto y la admiración para construir un futuro más justo y humano, siendo además conscientes de que la riqueza que nace de la diversidad”.
LP