La firma de moda italiana Prada apostó este domingo 14 de enero en la pasarela de Milán por destacar la dualidad del hombre entre la vida de oficina y la naturaleza, combinando el traje con gorros de lana que recordaron a los usados en la natación.
En esta tercera jornada milanesa de desfiles, la dupla de diseñadores Miuccia Prada y Raf Simons ha pensado una colección otoño-invierno para un hombre urbano que siente una "profunda necesidad" de conectarse con el mundo que le rodea.
Por eso la pasarela transcurrió entre sillas de oficina colocadas sobre un lecho de musgo, rocas y torrentes.
El hombre de Prada vestirá relajados trajes de corbata, con cinturones retorcidos, a veces más serios, pero también combinados con pantalones rojos o morados, así como elegantes sobre todos.
En la colección destacan dos piezas: una serie de sandalias entrelazadas y unos gorros como los que se usan en los deportes acuáticos, presentados en una infinidad de colores vivos.
Porque la intención, según ha explicado la marca, es destacar la dicotomía entre ambos mundos, el urbano y el natural.
Usuarios reaccionan a nuevas tendencias
Luego del evento, las pasarelas fueron revividas a través de las redes sociales de la marca de lujo en donde comenzó a generar diferentes opiniones al respecto. Algunos alababan estas nuevas creaciones, pero hubo cientos de comentarios en los que se mostraba la decepción de los usuarios por estas nuevas tendencias.
"No muy visionario, un poco de todo, sandalias feas, gorras no ayudan, pero buenos colores y música... infelizmente", "lo básico es tan aburrido para la moda", "sin ADN... Sin contar historias... Nada excepto fantasías... decepcionante...", "todos estos parecen como si hubieran sido sacados del armario del abuelo, y dicho abuelo había sido al menos dos tamaños más grandes", fueron algunos de los comentarios que se podían leer.
DAG
