Lejos de la tierra que les vio nacer, los venezolanos que llegaron a Tampico hace más de 20 años, se han adaptado al calor de la ciudad.
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Hallacas: identidad y unión
Sin estar ajenos al problema político que enfrenta Venezuela, siguen con las tradiciones en época donde las familias solían reunirse alrededor de la mesa para armar las “hallacas”, platillo navideño que se come en todo el mundo y que mantiene tradiciones indígenas precolombinas con influencia europea, principalmente españolas y africanas. Esta compleja mezcla se consolidó durante la época colonial y, con el tiempo, se transformó en un poderoso símbolo de identidad cultural y unión familiar.
Apenas llega el mes de diciembre y toda la comunidad venezolana se encuentra ansiosa por preparar el exquisito platillo que ahora, ante la migración, se hace en muchas partes del mundo.
Carolina Terán, Elian Ortiz y Maybe Ramos, se reúnen en casa cada año para recordar muchas de las cosas que solían vivir en la república Bolivariana al elaborar el platillo que es un símbolo del país.
Origen de las hallacas
Elian explica que las hallacas tiene su origen en la época colonial cuando los esclavos recibían todas las sobras de los grandes banquetes de sus amos “y ellos convirtieron todo eso que desperdiciaban sus amos en un platillo muy exquisito”. Comenta que dicho platillo se hace con harina de maíz conocida como harina pan, mientras que el guiso se realiza con carne de res, cerdo y pollo, con añadidos especiales como las pasas, cebolla, aceitunas, pimiento, caldo de gallina, “los ingredientes varían pues todo depende de la región que es cada persona”.
Un buen complemento para degustar las hallacas
Carolina Terán, coincide en decir que la mejor hallaca es la que hace mamá en casa y qué mejor que sea acompañada de la bebida “ponche crema” elaborada con ron que se elabora de distintas maneras, con flan, leche condensada, huevo, dependiendo la región.
“Lo más hermoso de todo esto es que todo se hace en familia donde cada integrante de la familia tiene una labor, cada uno contribuir en la mesa y es la mayor tradición que podemos tener todos los venezolanos, seamos de la región que seamos; es una gran felicidad para todos compartir estos momentos, compartir nuestras hallacas, nuestro ponche crema”.
La cantidad elaborada debe ser suficiente para que duren todo el mes de diciembre “hacemos suficiente para que en casa haya todo el mes hallacas, un platillo tradicional, como también lo es la ensalada de gallina, el pernil y el pan de jamón que nunca debe faltar en la mesa en la Navidad”.
En Marigüitar, ciudad de donde es Mayve Ramos, la hallaca lleva pimentón rojo “pimentón verde, pasitas, alcaparras, aceitunas, luego se envuelven en hoja verde de plátano, se amarra y a la olla”, afirma que es una tradición que data de hace muchos años y que hoy, a pesar de la migración de muchas familias, la comida navideña se sigue sirviendo en cada rincón del mundo donde hay un venezolano.
JETL
