Más Estilo

Discurso de odio: lado oscuro de la libertad de expresión

Datos del Conapred documentan la dificultad de aplicar regulaciones para frenar el discurso de odio, que se impone amparado en la libertad de expresión, sobre todo en redes sociales.

¿Dónde está el límite entre la libertad de expresión y el discurso de odio? Las expresiones de odio o el discurso destinado a intimidar, oprimir o incitar la violencia contra una persona o grupo con base en su raza, religión, nacionalidad, género, orientación sexual, aspecto físico, discapacidad u otra característica grupal, parecen imponerse como el lado oscuro de la libertad de expresión.

A pesar de los diversos acuerdos internacionales —la Convención Americana, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos—, así como lo establecido en el artículo 16 de la Constitución de nuestro país, que protege el derecho a la privacidad y establece además como “derechos de la personalidad” el respeto de la intimidad, el honor, la imagen y la dignidad de la persona, en México el discurso de odio se manifiesta cotidianamente escudado o sobrepuesto a la libertad de expresión.

TE RECOMENDAMOS: El Día de la Libertad de Prensa importa y ésta es la razón

[OBJECT]Además, este discurso se ha potenciado a través de las redes sociales, que funcionan como caja de resonancia de las ideas y concepciones de la sociedad. Hasta el momento se han realizado pocos avances en la tarea de contener este discurso en Twitter, Facebook, YouTube y otras plataformas.

En 2013, la Suprema Corte de Justicia de la Nación manifestó que la libertad de expresión no protege el discurso homofóbico. Los ministros apuntaron que las expresiones que estigmatizan la homosexualidad son consideradas discriminatorias ante la ley. Por ello establecieron la prohibición de utilizar palabra como puñal o maricón.

No obstante, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) señala que “ésta es una práctica cotidiana que consiste en dar trato verbal o físico desfavorable o de desprecio inmerecido a determinada persona o grupo”, como ocurrió hace poco en la campaña de la Iglesia católica contra al matrimonio gay.

Según un informe de Ricardo Bucio, ex presidente del Conapred, en nuestro país casi a diario se viralizan hashtags discriminatorios que relacionan la preferencia sexual, la falta de buen gusto o de recursos económicos con la apariencia física. Y aunque surgen voces indignadas que exigen frenar esas expresiones, esa reprobación no se materializa ni en reglamentaciones o autorregulación ni en un rechazo social concreto que detenga su reproducción, enmarcada en la libertad de expresión.

Bucio señala que cuando se detecta una situación de xenofobia, racismo, misoginia o clasismo en redes sociales, se cree que estas expresiones son inofensivas y se atribuyen a expresiones del humor del mexicano y sin consecuencias reales para la vida de las personas.

TE RECOMENDAMOS: Filtran manuales de Facebook para moderar contenido

Recordó que en 2012, Conapred dio a conocer los resultados del ejercicio denominado Tweetbalas: palabras que hieren a México, y los hashtags con más menciones fueron: #indio, #puto, #naco, #zorra, #eresputo y #bitch y otros epítetos ofensivos.

Por otra parte, un estudio de la compañía de seguridad informática McAfee asegura que el 47 por ciento de las jóvenes mexicanas entre los 12 y 16 años ha sufrido algún tipo de agresión a través de las redes sociales, principalmente en Facebook.

[OBJECT]La generación y propagación del discurso de odio en las redes sociales remite a una serie de problemas que, como sociedad, es importante detectar y enfrentar, ya que no se pretende censurar o limitar la genuina libertad de expresión, sino nulificar los componentes del discurso de odio que pasan por nacionalismo agresivo, antisemitismo, cyberbullying, fobia contra las religiones, intolerancia, clasismo, misoginia, homofobia, racismo, sexismo y xenofobia, hasta odio y miedo a la libertad.

TE RECOMENDAMOS: Desorden legal y misoginia contra víctimas de violación

Por ello, y protegiendo la libertad de expresión y atendiendo el efecto de las nuevas tecnologías de comunicación, el Estado Mexicano, a través del Conapred, se unió a la campaña que busca evitar cualquier tipo de odio o xenofobia en los distintos medios electrónicos.

México, como Estado observador del Consejo de Europa, también participa en la campaña contra el discurso de odio online y la campaña internacional del Movimiento contra el Discurso de Odio.


AG

Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.