La Semana Santa es una época de reflexión, tradiciones y, para muchos, de ajustes en la dieta debido a las costumbres religiosas. Una de las preguntas más comunes durante esta temporada es: ¿qué carnes puedo comer y cuáles debo evitar?
Aquí en MILENIO te explicamos todo lo que necesitas saber para planificar tus comidas y preparar tu despensa de manera adecuada, respetando las tradiciones y disfrutando de opciones deliciosas.

¿Por qué no se debe comer carne en Semana Santa?
En la tradición católica, la Semana Santa, especialmente el Viernes Santo, está marcada por la abstinencia de carne roja como una forma de penitencia y conmemoración del sacrificio de Jesús.
Esta práctica se deriva de las normas de la Iglesia, que históricamente han considerado la carne roja (como la de res, cerdo o cordero) un alimento asociado con la celebración, por lo que se evita en días de recogimiento.
Si sigues estas tradiciones, es importante planificar tus comidas con antelación para asegurarte de tener los ingredientes adecuados en tu despensa. A continuación, te damos una guía práctica.
Carnes y alimentos permitidos durante la Semana Santa
Aunque la carne roja suele estar restringida, hay muchas alternativas deliciosas y nutritivas que puedes incluir en tu menú. Aquí te dejamos una lista de opciones:
Pescado
El pescado es la estrella de la Semana Santa en muchas culturas. Es una fuente de proteína magra y se adapta a una gran variedad de recetas. Algunas opciones populares incluyen:
- Bacalao
- Salmón
- Tilapia o trucha
- Atún
Mariscos
Los mariscos son otra alternativa deliciosa y festiva. Puedes incluir:
- Camarones
- Calamares
- Mejillones o almejas
Pollo y otras aves (en algunos casos)
En ciertas regiones o interpretaciones menos estrictas, el pollo o el pavo se consideran aceptables, ya que son carnes blancas. Si decides incluirlos, opta por preparaciones ligeras como pollo al horno o a la plancha.
Opciones vegetarianas
La Semana Santa es una gran oportunidad para explorar platillos sin carne. Algunas ideas incluyen: Lentejas o garbanzos, tofu o seitán y verduras de temporada.
¿Qué carnes debo evitar?
Si sigues la tradición católica más estricta, deberías evitar:
- Carne roja: Res, cerdo, cordero, ternera o cualquier derivado (como embutidos de estas carnes).
- Carnes procesadas: Salchichas, jamón o tocino, a menos que sean de origen avícola o estén permitidos en tu comunidad.
¿Cómo preparar tu despensa para la Semana Santa?
Para que no te falte nada durante esta semana, te recomendamos organizar tu despensa con antelación. Ésta podría ser una lista de ingredientes esenciales y algunos consejos prácticos:
- Ingredientes básicos para platillos de pescado y mariscos:
- Pescado fresco o congelado (verifica que sea de buena calidad).
- Camarones, calamares o mejillones (frescos o enlatados para emergencias).
- Aceite de oliva, ajo, limones y hierbas frescas (como perejil o cilantro) para sazonar.
- Harina, pan molido o maicena para empanizar o espesar salsas.
Alimentos para opciones vegetarianas:
- Legumbres secas o enlatadas (lentejas, garbanzos, frijoles).
- Arroz, quinoa o pasta para acompañar.
- Verduras frescas (calabacín, espinacas, pimientos) y enlatadas (tomates, elote).
- Especias como comino, orégano o paprika para dar sabor.
Otros esenciales:
- Huevos: Ideales para tortitas de camarón, omelettes o como complemento en ensaladas.
- Quesos frescos o suaves: Para acompañar platillos o preparar postres ligeros.
- Frutas de temporada: Para postres o snacks saludables.
Planea un menú semanal para evitar compras de última hora. Esto te ayudará a calcular las cantidades exactas de cada ingrediente.