Una investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) destapó la existencia de una red de funcionarios, marinos y empresarios involucrados en el contrabando de millones de litros de combustible a través de la Aduana de Tampico.
El caso salió a la luz gracias al testimonio de un exdirector de la aduana porteña, quien bajo la figura de testigo protegido, detalló cómo operaba la estructura controlada por el grupo conocido como Los Primos, encabezado por el vicealmirante Manuel Roberto Farías Laguna y su hermano, el contralmirante Fernando Farías, ambos familiares del exsecretario de Marina, José Rafael Ojeda Durán.
De acuerdo con su declaración, cada buque que atracaba en el puerto debía entregar una “cuota” de un millón 750 mil pesos, dinero que era repartido entre mandos de la Marina y personal de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) para garantizar el paso sin inspecciones.
Los funcionarios implicados
El caso ha llevado a la detención de varios altos perfiles militares y civiles:
- Vicealmirante Manuel Roberto Farías Laguna: en retiro, excomandante de la 12ª Zona Naval en Puerto Vallarta. Arrestado el 2 de septiembre de 2025 por su presunta participación como líder de la red de huachicol fiscal.
- Francisco Javier Antonio Martínez: exdirector de Administración y Finanzas del Sistema Portuario Nacional en Tampico. Detenido el 4 de septiembre de 2025.
- Claudio Estudillo Villalobos: subdirector de operaciones de la aduana de Tampico.
- Capitán Sergio Varela: subdirector de Vigilancia y Control.
- Perla Elizabeth Castro Sánchez: jefa de departamento de Operaciones.
- Endira Xóchitl Palomo Chávez: jefa de Recintos Fiscales.
- Ismael Ricaño Matías: verificador.
- Anatalia Jocelyn Gutiérrez Gutiérrez: verificadora.
- Raúl Mendoza: jefe de Departamento de Módulos.
- Capitán Abraham Jeremías Pérez Ramírez y Capitán Raúl Tavera González, junto con personal de Unidades Navales de Protección Portuaria.
Además, se reportó la detención de seis marinos –incluido uno en retiro–, cinco funcionarios aduanales y tres empresarios relacionados con la red.
Una red de corrupción millonaria
Las pesquisas revelan que al menos seis buques cargados con combustible de contrabando atracaron hasta en 14 ocasiones en el puerto de Tampico, siempre bajo la protección de esta red. El cálculo indica que las ganancias ilícitas superaron varios cientos de millones de pesos.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) colaboró en el caso, detectando flujos financieros irregulares entre los funcionarios implicados y empresas fachada utilizadas para mover los sobornos.
Implicaciones nacionales
Este caso representa uno de los mayores golpes contra el huachicol fiscal marítimo, evidenciando la corrupción dentro de instituciones clave como la Marina y la ANAM. La FGR mantiene bajo reserva más detalles de la investigación, mientras que el testigo protegido podría aportar información adicional que implique a más funcionarios.
