Migrantes centroamericanos y la comunidad católica del albergue Belén de la zona fronteriza de México con Guatemala, realizaron una procesión en el marco del inicio de la primera semana del migrante y refugiado 2025.
El obispo de la Diócesis de Tapachula, Luis Manuel López Alfaro, hizo un llamado urgente a las autoridades para escuchar "el clamor de los que migran", quienes viven con la esperanza de encontrar trabajo, mejorar su situación de vida y hallar un lugar de paz donde vivir.
Obispo señala la concentración de migrantes
"Es aquí donde más se concentra la migración", afirmó el obispo, quien a su vez explicó que ante el colapso del flujo en Chiapas, algunos migrantes están comenzando a abrir nuevas rutas por Tabasco.
Sin embargo, advirtió sobre los riesgos de las caravanas migrantes, pues en ocasiones “entran personas con otros intereses”, por lo que pidió tener cuidado y mantener la misión de la Iglesia que es apoyar, acompañar y ser solidarios.
La caminata que inició en el albergue localizado en el centro de Tapachula, los migrantes de unas 10 nacionalidades llevaron consigo banderas de sus países, mientras que el pueblo creyente cargaron flores, veladoras y cantos durante su camino.

Migrante cubana denuncia violencia, robos y abusos
En entrevista, Ema, de nacionalidad cubana, denunció los riesgos que han enfrentado en su caminar donde han experimentado violencia, robos y abusos. "Queremos que las autoridades nos cuiden y protejan", pidió con firmeza.
“Hay muchas víctimas que quedan en el camino, muchas víctimas que están afectadas y de verdad que sí tenemos que luchar porque realmente seamos unidos y seguimos luchando para el amor y la verdad nos pudieran afectar, nos pudieron dañar, nos pudieran violar, entonces queremos evitar eso”, precisó.

La procesión culminó en el albergue Belén, con una misa encabezada por el director del albergue, César Augusto Cañaveral Pérez y el obispo de Tapachula, Luis Manuel López Alfaro.
AH