El pasado miércoles, las lluvias torrenciales llegaron al sur de Tamaulipas. Aquella tarde, Giovanna Gallegos, vecina de la colonia Unidos Avanzamos, en Altamira, se hacía a la idea de que el agua volvería a alcanzar sus viviendas, como tantas otras veces. Sin embargo, no imaginaba que las corrientes arrastrarían hasta su casa un derrame de crudo. Lo perdió casi todo y hoy vive en la incertidumbre.
A casi una semana del temporal, el sol volvió a salir sobre la colonia y el nivel del agua en la calle Barranco ha disminuido considerablemente. Pero aunque el clima cambió, la situación para Giovanna y al menos otras diez familias sigue siendo preocupante por las afectaciones ocasionadas por el hidrocarburo, proveniente de una aparente fuga de Pemex localizada a poco más de un kilómetro de distancia.
Las lluvias llegaron con fuerte olor a petróleo
Los vecinos relatan que, días antes de las lluvias, personal de la empresa trabajaba en la reparación del desperfecto. La tormenta los sorprendió y el crudo fue arrastrado hasta las viviendas.
Giovanna recuerda que se dio cuenta de inmediato del problema cuando sus pies comenzaron a mancharse de “chapo”, como llaman al residuo aceitoso. A ello se sumó el fuerte olor del petróleo, que le provocó náuseas y dolores de cabeza que intentó mitigar con paracetamol.
No era solo agua. El vital líquido se mezcló con los residuos, lo que la llevó a abandonar su casa junto con su familia y refugiarse en una vivienda prestada, casi a la entrada de la colonia, donde el derrame no alcanzó.
A medida que el agua estancada descendía, su patrimonio se iba tiñendo de un tono marrón oscuro. Ahora su casa parece un sitio calcinado: las plantas están negras, su pequeño sembradío de maíz murió y los electrodomésticos, asegura, quedaron inservibles.
"No es dañino": PC
El pastizal de la calle Barranco también está ennegrecido y se extiende por más de 500 metros. Ahí yace un perro, casi mimetizado con la vegetación. Frente a esa escena vive Santa Amalia, que aún padece dolor de cabeza tras golpearse al resbalar con el crudo. La mujer, madre de familia, cuenta que personal de Protección Civil acudió a revisar la zona y aseguró que “no era dañino”, una versión que no la convence: con el calor, dice, los olores se intensifican de nuevo.
Ambas mujeres coinciden en que urge la intervención de las autoridades para limpiar el área y reparar los daños, especialmente los sufridos por Giovanna, que perdió su patrimonio entre el agua y el crudo.
Fuga de crudo tenía más de un mes y el remanente alcanzó viviendas en Altamira: Ecología
La fuga de crudo que terminó afectando a viviendas de la colonia Unidos Avanzamos en Altamira no fue un incidente reciente. De acuerdo con la Dirección de Ecología del municipio, el hidrocarburo provenía de un remanente que permanecía en un predio desde hace más de un mes y fue arrastrado por las intensas lluvias registradas la semana pasada.
Rubén Herver Zárate, titular de la dependencia, explicó que la situación se originó luego de una fuga reportada hace aproximadamente mes y medio, en la cual personal de Petróleos Mexicanos realizó labores de reparación sin garantizar la limpieza completa del área afectada.
Esa omisión, dijo, provocó que los residuos fueran arrastrados por las corrientes pluviales hasta zonas habitadas.
El funcionario calificó el hecho como una situación que pudo haberse evitado y señaló directamente a Pemex como responsable de los daños ambientales y sociales.
Recordó que, hasta el momento, existen tres denuncias formales interpuestas ante la Agencia de Seguridad, Energía y Medio Ambiente (ASEA) por afectaciones similares, además de una cuarta que está en proceso de presentarse por una fuga en el ejido Maclovio Herrera, que ha permanecido activa por más de dos meses y dañado sembradíos de un particular.
SJHN/ICGC
