El grupo oriundo de Sinaloa regresó a la capital del país después de sus conciertos en el Auditorio Nacional, hace apenas cuatro meses; ahora en el Palacio de los Deportes; Los Tigres del Norte ofrecieron a sus fans una noche llena de música y baile.
Cerca de las nueve de la noche, en las pantallas se pasó lista de los integrantes del grupo al estilo de lotería, temática del concierto. Jorge Hernández, Hernán Hernández, Eduardo Hernández, Luis Hernández y Óscar Lara emergieron en plataformas al fondo del escalonado escenario.
Tras arrancar con las canciones “Pacas de a kilo”, “El avión de la muerte” y “Mi buena suerte, el vocalista principal dio la bienvenida al público.
“Buenas noches, bienvenidos. Está noche venimos con todo el gusto de tocarles todas las canciones que sean posibles”, dijo Jorge Hernández.
Durante “Aquí mando yo”, el cantante se acercó a los extremos del escenario para saludar con su sombrero a la gente en gradas, sin dejar de cantar ni tocar su acordeón.
“A ver Palacio de los Deportes ¿Están listos para escuchar una canción clásica de Los Tigres del norte?”, les preguntó antes de interpretar “La Reina del sur”.
También lee...
Mientras se escucharon temas como “Prisión de amor” y “La camioneta gris”, sus fans los ovacionaban con gritos, aplausos y uno que otro "Ajúa".
“Ya nos pusimos románticos, ya nos pusimos tristes, ya cantamos corridos. Pero llegó el momento de bailar”, propuso Jorge.
Entraron al escenario varias bailarinas con vestidos rojos de carnaval para bailar “La manzanita”. El ballet estuvo entrando y saliendo del escenario a lo largo de la noche según lo ameritaba la canción de turno, que también condicionó su vestimenta en cada participación.
“Una canción especial que nos identifica, para ustedes ‘La jaula de oro’” presentaron con emoción.
Los Hernández leyeron una carta dedicada a las mujeres y agradecieron a sus seguidores por acompañarlos en su viaje musical que comenzó en 1968.
Celebraron el momento tocando “La Carta”, canción que aseguraron llevaba 188 millones de vistas y después de “Me regalo contigo”, adelantaron que seguía una historia entre dos hermanos que todos conocían.
“Pedro que gusto de verte, supe que eras licenciado”, fueron de los versos que más fuerte se escucharon en el concierto, gracias al cariño que los presentes le guardan a “Pedro y Pablo”.
“Qué bonito se siente cantar en el Palacio de los Deportes, vamos afinando gargantas porque está canción todos la hemos cantado cuando nos mandan a ‘La mesa del rincón’”, dijo Jorge siguiendo con el repertorio.
Los músicos hicieron una pausa a las canciones del grupo, mientras que en el escenario un grupo de mariachis interpretó temas como “Son de la negra” y “Los mandados”, eventualmente se les unieron los Tigres para cantar “Por tu maldito amor”.
“Siempre que venimos al DF nos dicen lo mismo, que aquí mandan las mujeres, ¿Es cierto?”, preguntó Hernán, agregando “A unos de aquí si mandan”, señaló a los integrantes casados.
Realizaron una competencia entre hombres y mujeres en canto y luego en gritos, reconociendo a las mujeres como ganadoras. Los presentes se alborotaron al escuchar “Jefe de jefes”, se pusieron de pie con “Golpes en el corazón” y durante “La lotería” en las pantallas se contó su historia en animación.
“Vamos a retroceder en la máquina del tiempo para uno de nuestros primeros corridos que se hicieron conocidos gracias a ustedes, esto es ‘La banda del carro rojo’”, dijo Jorge.
Ordenaron bailar a todos en el recinto “La yaquecita”, le siguieron canciones que aseguraron no podían faltar en su repertorio como “La puerta negra” y “Hermoso cariño”, tocando más de cuarenta canciones la velada de tres horas ante un sold out de 18 mil personas que cantaron y bailaron sin importar el cansancio.
OAGP
