El cuerpo del bailarín Francisco ‘P’, mejor conocido como 'Medio Metro de El Alto', fue encontrado en una barranca en Puebla. De acuerdo con los primeros informes, el hombre tenía un golpe en la cabeza y presentaba descomposición.
Su muerte sacudió a la comunidad sonidera de México, ya que no es el único bailarín con el apodo y sigue siendo uno de los temas más debatidos dentro del mundo de la cumbia. A continuación te decimos quién es el verdadero dueño de la marca “Medio Metro”.

La lucha por la marca registrada "Medio Metro"
La disputa sobre la marca "Medio Metro" tiene varias facetas luego de que el Sonido Pirata, junto con José Eduardo Rodríguez Anguiano, se viralizaron en redes sociales y, tras su salida, el bailarín Jonathan Uriel ocupó su lugar.
Rodríguez como una forma de frenar la popularidad de Sonido Pirata y Jonathan Uriel decidió registrar en el Instituto Nacional del Derecho de Autor (INDAUTOR) la marca de "Medio Metro".
Es por eso que José Eduardo Rodríguez Anguiano, quien popularizó el personaje con el disfraz de El Chavo del Ocho, es el único que tiene un registro legal de la marca.
Fue en 2023 cuando Rodríguez logró registrar "Medio Metro" ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y el INDAUTOR, asegurando su derecho exclusivo de uso hasta el año 2028.

Este registro otorgó a José Eduardo Rodríguez el control sobre la marca "Medio Metro" tanto en el ámbito comercial como en el de entretenimiento.
Sin embargo, otros bailarines, como Jonathan Uriel, Medio Metro de Sonido Pirata y Francisco Pineda Pérez, conocido como "Medio Metro de Puebla", también han adoptado este nombre en sus presentaciones, lo que ha generado confusión sobre quién tiene el derecho legítimo sobre el apodo.
Francisco Pineda: ¿Una víctima en la disputa por "Medio Metro"?
Francisco Pineda Pérez, conocido como "Medio Metro de Puebla", fue uno de los primeros en utilizar este apodo dentro de la escena sonidera de Puebla, desde el 2004.
A diferencia de otros, Francisco no adoptó el disfraz de El Chavo del Ocho, manteniendo su estilo personal y sin realizar un registro formal del nombre.
La muerte de Francisco Pineda, cuyo cuerpo fue hallado en un estado de descomposición avanzado, se está investigando bajo el protocolo de crimen.

APC