Karla Díaz, cantante y conductora del programa Pinky Promise, reaccionó a las críticas que han surgido en TikTok sobre su restaurante Pinky Room, donde varios usuarios aseguran que los precios son elevados en comparación con el tamaño de las porciones que reciben.
La ex integrante de JNS afirmó que está al tanto de los comentarios y explicó cómo su equipo ha manejado la situación.
Karla Díaz explicó en una entrevista en el programa 'De Primera Mano' que ahora que se estrenó como emprendedora restaurantera está aprendiendo sobre el negocio, pues aunque antes de abrirlo se empapó lo más que pudo sobre el tema también se ha acercado a expertos en el ramo.
“El tema restaurantero es un tema que no conocíamos, que nos empezamos a empapar antes de abrirlo y obviamente estamos acercándonos a gente experta en la rama”, señaló.
Respecto a las críticas que ha recibido el restaurante de Karla Diaz, la cantante y conductora añadió que entiende que siempre habrá comentarios positivos y negativos:
“Siempre hay alguien que va a señalar, pero antes no había redes sociales, pero ahorita todo se maximiza”.
Díaz reveló que su equipo incluso intentó contactar a la creadora de TikTok que realizó la reseña donde mencionaba que los platillos eran pequeños y caros.
Según la cantante, la intención era invitarla nuevamente para que viviera otra experiencia en Pinky Room. Sin embargo, la joven no respondió los mensajes. “Nunca contestó, nos dejó en visto varias veces”, aseguró.
Karla Díaz reacciona a las críticas a su restaurante Pinky Room
¡Karla Díaz RESPONDE a las CRÍTICAS contra su RESTAURANTE! Recompensará las malas experiencias #DePrimeraMano???? de lunes a viernes 3 pm por el 3.1 de #ImagenTelevisión: https://t.co/oaYomlm1L7 pic.twitter.com/xQtfdL3kgx
— De Primera Mano (@deprimeramano) November 27, 2025
Así es Pinky Room, el restaurante de Karla Díaz
Pinky Room combina restaurante, set fotográfico y una réplica del escenario de Pinky Promise. También cuenta con una tienda de regalos, aunque los visitantes han señalado que los productos tienen precios excesivos.
Los comensales han expresado varias quejas, especialmente sobre la comida. Algunos señalan que ciertos platillos tienen sabor insípido o incluso texturas duras. Los precios, que van de 170 a 680 pesos, también han sido motivo de inconformidad, pues aseguran que las porciones son pequeñas para el costo. A ello se suman reclamos sobre el servicio, ya que algunos meseros olvidan las peticiones de los clientes.
Pese a las críticas, Karla Díaz reiteró que siguen trabajando para mejorar la experiencia y aprender de los comentarios. “Estamos acercándonos a gente experta”, insistió, confiando en que Pinky Room continúe creciendo y perfeccionándose.
JCM