El actor Jesse Eisenberg, conocido por sus papeles en La Red Social y Zombieland, sorprendió al mundo al anunciar que donará uno de sus riñones a una persona completamente desconocida.
La cirugía se realizará a mediados de diciembre y forma parte de un acto de altruismo que el propio actor considera “prácticamente libre de riesgos” y “muy necesario”.
¿Qué es una donación altruista?
Durante una entrevista en el programa Today, Eisenberg explicó su decisión con naturalidad:
“Voy a donar mi riñón en seis semanas. De verdad… Me picó el bichito de la donación de sangre. Voy a hacer una donación altruista a mediados de diciembre. ¡Estoy muy emocionado de hacerlo!”
Este tipo de donación, conocida como trasplante no dirigido, significa que el donante no conoce al receptor y no tiene ningún vínculo familiar con el donante.
El órgano se destina al banco de trasplantes para beneficiar a alguien compatible que lo necesite con urgencia.
“Es prácticamente sin riesgo y muy necesario. Creo que la gente se dará cuenta de que es una decisión obvia, si se tiene el tiempo y la disposición”, agregó el actor.
Cómo funciona un trasplante en cadena
Eisenberg destacó que su donación altruista ayudará a crear un trasplante en cadena, un proceso donde su riñón puede ir a un paciente cuyo familiar desea donar pero no es compatible.
Ese familiar, a su vez, dona a otra persona compatible, multiplicando las vidas salvadas gracias a su acción inicial.
El actor, que ya es donante habitual de sangre, espera que su gesto inspire a otros y ayude a desmitificar el proceso:
“No tiene nada de heroico. Solo pensé que, si podía hacerlo, debía hacerlo.”
Según los expertos, la donación de riñón es un procedimiento relativamente seguro, y la mayoría de los donantes se recupera por completo en pocas semanas.
Esto refuerza la idea de que la decisión de Eisenberg es un acto consciente, informado y generoso.
La noticia ha sido destacada por medios internacionales, subrayando la importancia de las donaciones altruistas y el impacto positivo que puede generar un solo gesto.
Con este acto, Jesse Eisenberg demuestra que cada acción desinteresada puede transformar vidas, recordando a todos que todos podemos marcar la diferencia.