Ozzy Osbourne, el cantante de Black Sabbath, ha muerto a los 76 años "rodeado de amor", informó este martes su familia en un comunicado.
"Es con una tristeza indescriptible que informamos del fallecimiento de nuestro querido Ozzy Osbourne esta mañana. Estaba con su familiares, rodeado de amor. Pedimos que respeten la privacidad de la familia", dijeron sus allegados en la nota.
Osbourne no solo dejó un legado musical inigualable, sino también una fortuna construida a lo largo de cinco décadas de carrera. Desde los días oscuros con Black Sabbath hasta su faceta como estrella de la televisión, el llamado Príncipe de las Tinieblas supo convertir su imagen y talento en millones.

¿Cuál era la Fortuna de Ozzy Osbourne?
De acuerdo con estimaciones de Finance Monthly, al mes de junio de 2025, el patrimonio neto de Ozzy Osbourne alcanzaba los 220 millones de dólares. Una cifra respaldada por la venta de discos, regalías, conciertos, acuerdos comerciales y, por supuesto, los ingresos generados por su icónico reality The Osbournes.
A lo largo de su carrera, Ozzy Osbourne vendió más de 51 millones de discos como solista, según cifras de Chartmasters, empresa especializada en análisis de la industria musical. Pero su impacto real se multiplica si se suma su etapa con Black Sabbath: juntos han vendido más de 75 millones de álbumes, consolidando un total que supera las 120 millones de unidades distribuidas en todo el mundo.
Solo en Spotify, su catálogo sigue generando millones. Hasta julio de 2025, Ozzy acumulaba más de 3 mil 800 millones de reproducciones en la plataforma. Su tema más reproducido, Crazy Train, ronda los 242 millones de streams, mientras que Paranoid —el himno eterno de Black Sabbath— superó los mil millones y se incorporó al exclusivo “Billions Club”.
Las regalías por streaming, sincronización en series, películas y videojuegos mantuvieron activo su flujo de ingresos incluso en sus años más complicados de salud.

El Ozzyfest
Otro de los pilares económicos en la carrera de Osbourne fue el Ozzfest, festival creado en 1996 junto a su esposa Sharon. Más que una gira, el Ozzfest se convirtió en un fenómeno global que impulsó a decenas de bandas y redefinió los modelos de negocio del metal.
Durante sus distintas ediciones, el Ozzfest generó más de 100 millones de dólares en ingresos, entre venta de boletos, mercancía oficial y acuerdos de patrocinio con marcas vinculadas al estilo de vida rockero. Además, ayudó a posicionar a Ozzy no solo como artista, sino también como empresario y curador de talento.
De los escenarios al sillón: Ozzy también conquistó la televisión
Aunque el mundo lo conoció por sus gritos desgarradores, una nueva generación lo descubrió en pantuflas. El reality The Osbournes, transmitido por MTV entre 2002 y 2005, mostró su vida familiar caótica, divertida y entrañable. Fue un éxito rotundo que catapultó nuevamente su imagen y generó millones en ingresos por publicidad, derechos de emisión y productos derivados.
Su participación en otros especiales de TV, documentales y apariciones recurrentes en programas británicos y estadounidenses también le valieron jugosas sumas.
Incluso tras su retiro de los escenarios, Ozzy Osbourne mantuvo una presencia activa en medios, lanzamientos discográficos, colaboraciones con artistas como Post Malone y participaciones esporádicas en entregas de premios o homenajes. Su imagen, reconocible en todo el planeta, se convirtió en marca registrada: desde camisetas y figuras coleccionables hasta una línea de NFTs lanzada en 2022.
Hoy, tras su muerte, se estima que su legado económico continuará generando ingresos para su familia, principalmente a través de regalías musicales, contratos de reproducción, licencias y ventas digitales.

JCM