Durante la 67ª edición de los Premios Ariel, Yibrán Asuad, ganador de la estatuilla a Mejor Edición por su trabajo en La cocina, protagonizó uno de los momentos más inesperados y emotivos de la noche.
Entre aplausos, el cineasta se abrió paso entre los asientos y caminó tranquilamente hacia el escenario para recibir su estatuilla. Sin que nadie lo esperara, su discurso estaba a punto de convertirse en el momento más memorable de la noche.

El ascenso al escenario: un gesto de humanidad
Al subir al escenario a recibir su premio, en lugar de dar un discurso tradicional, Yibrán se dirigió al público y pidió un minuto de silencio. Con la estatuilla en mano, declaró:
"Por las víctimas de genocidio de Israel vamos a guardar silencio".
El público en la sala de premiación se mantuvo en silencio en un gesto de solidaridad. Sin embargo, el emotivo momento fue interrumpido de forma abrupta por la música de fondo del evento. A pesar de la interrupción, el gesto del artista se convirtió en un acto de conciencia social que resonó profundamente en el público.
En redes sociales, muchos comentaron que Yibrán no solo ganó por su trabajo técnico, sino también por el valiente uso de su plataforma para llamar la atención sobre una causa global.
#Cultura | #Ariel2025
— SPR Informa (@SPRInforma) September 21, 2025
El realizador cinematográfico Yibrán Asuad fue reconocido con el Premio Ariel a Mejor Edición por su trabajo en el largometraje La cocina. Durante la ceremonia, cedió su tiempo de discurso para guardar un momento de silencio en solidaridad con #Palestina. pic.twitter.com/AA66vZA4wn
Un editor con trayectoria y una voz comprometida
Yibrán Asuad es una figura consolidada en la industria cinematográfica mexicana. Con una destacada carrera como editor, ha colaborado en importantes proyectos como La región salvaje y Museo, películas que le han valido reconocimiento por su habilidad para dar forma a narrativas complejas.
Su trabajo en La cocina, película dirigida por Alonso Ruizpalacios, confirma su lugar como uno de los talentos más respetados de su generación.
Su gesto en los Premios Ariel se suma a la tradición de artistas que utilizan su voz para alzarla en eventos públicos. En el pasado, figuras como el cantante Residente han mostrado su apoyo a la causa palestina, llegando a invitar a niños de la Franja de Gaza a su concierto en México para visibilizar la situación.
De la misma forma, artistas de talla internacional como Dua Lipa y Roger Waters han sido muy abiertos sobre su postura, usando sus redes sociales y plataformas para denunciar las atrocidades del conflicto.
El gesto de Asuad, aunque breve, refuerza una postura de compromiso y empatía que muchos artistas eligen manifestar, utilizando su influencia para ir más allá del entretenimiento.

La conexión entre su premio y su discurso
El mensaje de Yibrán Asuad se alinea con la temática de la película por la que fue premiado. La cinta, La cocina, ambientada en un restaurante de Nueva York, aborda directamente las duras condiciones de vida de los trabajadores inmigrantes.
La historia expone la precariedad laboral, la discriminación y la lucha por la supervivencia de estas comunidades.
Al usar su momento de gloria para hablar sobre una situación de conflicto y desplazamiento, el editor no solo expresó su opinión personal, sino que también estableció un vínculo coherente entre la narrativa del filme y la realidad social.
Su activismo se vuelve un eco del mensaje de la película, utilizando el arte para reflejar y confrontar la injusticia.