Los aficionados de los San Francisco 49ers mantienen viva una tradición única cada día de partido: el tailgate. Desde temprano, los estacionamientos del Levi’s Stadium se tiñen de rojo y dorado mientras “The Faithful” se reúne para celebrar su amor por el equipo. Entre música, comida y camaradería, se respira un ambiente de fiesta y optimismo que enciende el espíritu antes del kickoff.
El entusiasmo es contagioso. Bandas en vivo, DJs y actividades organizadas crean una experiencia inolvidable donde la unidad y el fervor por los 49ers son los verdaderos protagonistas. En cada rincón se comparte la misma esperanza: ver al equipo triunfar una vez más.
En esta ocasión, la afición se dio cita en Santa Clara, California, con la ilusión de conquistar otro clásico del norte contra los rivales del sur del estado —el esperado duelo NorCal vs. SoCal-.
La pasión se mezcló con la diversidad: colores, acentos y culturas diferentes convivieron bajo una misma bandera. Entre los asistentes destacaban fanáticos de México, India, Hawái e incluso de Europa, todos unidos por el mismo sentimiento.
- Los aficionados, conocidos como la “49er Faithful” forman una comunidad que celebra con orgullo la historia del equipo.
- Los estacionamientos se transforman en un festival de barbacoas, música y camaradería.
- Es el punto de encuentro ideal para reencontrarse con amigos o hacer nuevos, todos movidos por la misma pasión.
- El tailgate es más que una tradición: es el corazón de la experiencia del día del partido.
Como antecedente, el pasado 2 de octubre, los fanáticos de los 49ers volvieron a dejar huella al pintar de rojo el SoFi Stadium en Inglewood, casa de los Rams. Aquella noche, San Francisco se impuso en tiempo extra por 26-23, confirmando que, sin importar la ciudad, “The Faithful” siempre se hace presente.
CIG
