Ante el caso del cineasta sampetrino, Bernardo “N”, vinculado a proceso por los presuntos delitos de robo con violencia y lesiones contra dos guardias de la colonia Olinalá, en San Pedro, el coordinador de la bancada del PRI, Heriberto Treviño Cantú, presentó una iniciativa de reforma para incrementar hasta casi 11 años las penas por lesiones cometidas contra personal de vigilancia en turno en colonias, fraccionamientos o inmuebles de casa-habitación.
Treviño también presentó otra reforma a la Ley de Seguridad Privada para que los guardias estén obligados a capacitarse en derechos humanos, primeros auxilios, solución pacífica de conflictos, manejo de situaciones de riesgo y defensa personal básica.

“La protección y dignificación de los guardias de seguridad privada es una tarea urgente y colectiva, ya que su trabajo representa un pilar esencial para la paz social y la protección del patrimonio familiar en colonias, fraccionamientos y edificios”.
“Hemos sido testigos de agresiones verbales y físicas que han sufrido guardias privados que solo cumplen con su deber, por lo que es necesario otorgarles la protección legal y la formación adecuada”, apuntó.
El Código Penal local, expuso en un comunicado, establece que la pena mínima por causar lesiones es de tres días de arresto cuando el daño físico tarda menos de 15 días en sanar, mientras que la sanción máxima puede alcanzar hasta siete años de prisión si las lesiones ponen en peligro la vida de la víctima.
Y se propone incrementarlas hasta una mitad, para ser de cuatro días y medio, y hasta 10 años y medio, respectivamente.
La iniciativa de reforma que fue entregada en la Oficialía de Partes contempla adicionar el artículo 303 bis 1, del Código Penal y el artículo 29 bis, a la Ley de Seguridad Privada para el Estado.
“Además estoy planteando que haya programas obligatorios de capacitación en derechos humanos, resolución pacífica de conflictos y otros aspectos para disuadir la violencia y fortalecer la seguridad en la comunidad”, explicó.
Treviño Cantú recordó el reciente caso de un vecino de San Pedro que agredió a dos guardias de seguridad en el acceso a la colonia Olinalá, y hechos similares se han cometido en Monterrey, Juárez, García y Apodaca.
mrg