Como cada 12 de Diciembre, el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en Guadalajara lució atestado de toda clase de personas, sin distinción de raza o clase social. Miles de fieles se dieron cita para venerar a la Virgen de Guadalupe en su Santuario de Guadalajara.
Algunos como Felipe Carrero Covarrubias, van a agradecer por el don de la vida y aunque no tiene una de sus piernas a raíz de un accidente, eso no lo detuvo de visitar a la Morenita del Tepeyac.
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"Me atropelló un camión y mis papás me consagraron a la virgen y es agradecimiento de cada año, de cada año venir con la virgen", dijo con devoción.
El frío tampoco fue obstáculo para Oscar, quien durmió en la explanada del Santuario en compañía de sus hijos. Una casita de campaña de su hija menor fue su techo durante la noche.
"Pues con frío pero desde ayer estamos, desde la 1 de la mañana, con la emoción y bueno pues que sepan que hace milagros pues, que vengan más seguido ellos también. Le di gracias por la salud de mi hija que ya se me estaba yendo y por mi hijo, aparte mi mamá y papá", expresó Oscar.
Como es tradición, muchos bebés, niños y niññas llegaban disfrazados de indígenas o de San Juan Diego. Incluso, los adultos también se sumaron a esta tradición.
Dos países unidos por el amor a la Morenita
En la fe también hay diversidad de realidades y por ende de peticiones. Virginia y su esposo Ignacio han residido toda su vida en Los Angeles, Estados Unidos, pero sus padres mexicanos les inculcaron el amor por la Morenita, así que por primera vez, pudieron viajar a Guadalajara para visitar a la Virgen de Guadalupe en su casa: el Santuario.
Ellos piden paz pues las redadas de ICE han generado miedo y zozobra a los migrantes.
"Yo pido mucho por mi país y por la gente porque mucha gente mexicana, he visto mucho racismo. Los están recogiendo y las familias quedan quebradas, para mí me parte el alma porque no debe de ser", dijo Virginia.
"Con estos tiempos difíciles se ve que hay un racismo muy grande pero aquí en México es un país que aún tiene corazón y siempre manos abiertas para nosotros que venimos pa'lla. Esos tiempos van a pasar, entonces la gente que tenga fe y los milagros de la virgen que nos ayuden", pidió Ignacio.
Desde temprana hora, hubo fila para ingresar al Santuario así como lleno total en el recinto.
Cardenal exhorta a tratar con hermandad al prójimo
Durante la Misa de las Rosas celebrada en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en honor a la Morenita del Tepeyac, el cardenal Francisco Robles Ortega, exhortó a los feligreses a tratar al prójimo con hermandad.
"Ante las penurias que pasamos, ante las grandes dificultades que enfrentamos, dígase la violencia, dígase la carencia, cualquiera de las necesidades que experimentemos, no olvidemos nuestra condición de hermanos, somos hijos de Dios", dijo el también arzobispo.
El líder religioso pidió a los fieles estar abiertos al diálogo para resolver conflictos y nunca olvidar tratar al prójimo con hermandad.
"Y nos asumimos como verdaderos hermanos, hay quien se considera superior o mejor o perfecto o más santo que los demás y desprecia a los demás. Todos somos pecadores y necesitamos y necesitamos del amor, necesitamos de la misericordia y necesitamos de la gracia de Dios, por eso María nos trajo a su hijo", recordó.
La Misa de las Rosas es una celebración litúrgica que tiene como propósito conmemorar el momento histórico en el que San Juan Diego presenta ante Fray Juan de Zumárraga su tilma con rosas donde apareció la imagen de la Virgen de Guadalupe.
Según datos de Protección Civil y Bomberos de Guadalajara, visitaron las inmediaciones del Santuario alrededor de 100 mil fieles, con saldo blanco, 15 antenciones pre-hospitalarias menores y una persona extraviada, que fue recuperada por sus familiares momentos después.
OV
