Hablar de complejidades puede ser interminable, pues todo depende de la perspectiva desde la que se mire, y este es el caso de Óscar Manuel Hernández, cuya actitud, pese a las dificultades de salud que ha enfrentado, ha logrado abrir caminos y mover voluntades.
Debido a una enfermedad letal, el cáncer de piel, a Óscar tuvieron que amputarle su pierna derecha, pero aún está combatiendo el mal con mucho optimismo y esperanza.

Esa situación no ha sido un impedimento para continuar su vida, y al contrario ha sido un impulso para seguir adelante.
Después de que se dio a conocer su historia en Telediario, la ayuda estuvo llegando, dejándole un rayo de esperanza para poder completar la prótesis que necesita y además continuar con las cinco quimioterapias que le faltan.
“Todo el transcurso del día me estaban marcando y el domingo en la mañana me marcó la persona que me va a donar la prótesis”, comentó.
Pero bien dicen que la gratitud no conoce de fronteras, pues Óscar recibió una llamada de forma anónima desde el Valle de Texas, en Estados Unidos, donde le decían que ya no se preocupara por la prótesis, porque aquello que tanto anhelaba se iba a hacer realidad.
Además, otra persona se comprometió a que un ortopedista iba a modificarle la prótesis si es que se necesitaba, todo para que tuviera una mejor calidad de vida.
El joven de 26 años, acompañado de Luna, su perrita, agradeció a toda la gente por la ayuda brindada, pues la batalla aún continúa.
“Todo bien, hay que echarle ganas, aquí tengo la felicidad, a mi perrita, es la que me motiva a seguirle echando ganas”, señaló.
El caso de Óscar también circuló en redes sociales, en donde se dio a conocer que cuando su enfermedad empezó a causar estragos en su salud, perdió su empleo.
Luego se informó que empezó a recibir quimioterapia, pero que a pesar de eso tuvieron que amputarle su pierna, y que para solventar los gastos de su recuperación tuvo que vender diversos bienes y electrodomésticos.
El joven tiene que trasladarse en camión, apoyado en muletas, a recibir la quimio y cuando tiene algo de dinero paga taxi para no afectar más su condición.
El joven es un ejemplo de que, aun en medio de la adversidad, siempre es posible encontrar una luz de esperanza, y su historia es testimonio de que con actitud y fortaleza se pueden mover voluntades.
nrm