Lejos de los grandes almacenes, de las tiendas departamentales, de la comodidad del aire acondicionado y entre el bullicio de las calles de un día de quincena en Tampico, se desarrolla “el otro Buen Fin”.
Ése que se canta en las banquetas del segundo cuadro, que no se anuncian en carteles y en anuncios publicitarios, sino en la voz de José Jiménez, vendedor de frutas y verduras en la calle.
“Normalmente la bolsa de plátanos la tengo a $20, pero ahorita la estoy dando a $10”, asegura el comerciante, para sumarse a la estrategia de venta.
El señor canta sus ofertas. Hay que sumarse a la estrategia para vender más, es la mentalidad de María Aguilar, propietaria de la Torta Feliz, que también definió un plus para sus clientes.
En este Buen Fin, a todos los clientes que adquieran 5 tortas de la barda o más, les van a regalar un refresco de dos litros. A quienes acudan por su torta especial, les van a obsequiar el café, el agua de sabor o el refresco.
Las promociones se anuncian afuera del local, en la banqueta y eso llama la atención de la gente que camina por el primer cuadro de la ciudad que, ante la cercanía de la hora de la comida, quiere calmar el hambre.
En el mercado es complicado que los comerciantes se sumen a esta estrategia que ya tiene 15 años, porque los precios suben; sin embargo, se ponen la camiseta y aguantan los incrementos.
Gloria Zubieta, líder de los mercados, aseguró que a pesar de los incrementos, los comerciantes no aumentan sus precios, porque se llega a encontrar comida corrida a $45, lo que muy bajo en comparación a otros sitios del centro de Tampico.
Promociones
Negocios formales e informales adornan las calles del centro de Tampico con letreros anunciando sus propias ofertas, desde ropa, juguetes, alimentos y despensa básica.
yc