Especímenes que no alcanzan el metro de longitud y otros que son del tamaño del brazo de un humano adulto ya se apropiaron de la Laguna del Carpintero en Tampico. Son cocodrilos que parecen arrullarse con el sonido de los autos que pasan por el Perimetral y con el ladrido de los perros desde las colonias cercanas.
Nada les molesta. Flotan en el agua y apenas asoman su cabeza, buscando los rayos del sol de una mañana fresca en Tampico. Desde pequeños, un poco más grandes y grandes, los saurios aparecen a cada 5 pasos. Una nueva generación de cocodrilos, de juanchos como se les conoce en el sur de Tamaulipas, ya se abre camino.
Reubicación de cocodrilos
La autoridad los quiere sacar de las lagunas, llevarlos a otros lugares porque ya son un problema cuando se salen de su hábitat; sin embargo, su adaptación es única y se siguen reproduciendo.
Mientras en Ecología de Tampico y el estado definen qué harán, la naturaleza se abre camino en la Laguna del Carpintero, pequeños juanchos ya hacen de las suyas, tienen sus espacios entre las enredaderas que el mangle tiene de raíz. En un kilómetro, hay más de una docena de cocodrilos de diferentes tamaños, algo no muy común.
Aprovechan para tomar el sol como una forma de regular su temperatura, algunos, hasta comparten el espacio para estar con el hocico abierto, apuntando hacia el Puente Tampico.
Cerca del mediodía la poca gente que pasa caminando, haciendo ejercicio o paseando a sus mascotas, observa el espectáculo natural protagonizado por los saurios, que nada parece interferir con su momento de relajación.
Un enorme cocodrilo, que tiene manchas rojas en su cuerpo, como de óxido, supera los 2.5 metros y asoma parte de su cuerpo en las cercanías del puente que cruza la Laguna del Carpintero, es un espécimen grande, que capta la atención de un joven que le toma fotos y videos.
Censo de cocodrilos en Tampico
En el 2021 se realizó un censo en la laguna del Carpintero, fue realizado por especialistas, por funcionarios y personal de S.O.S Cocodrilo. La conclusión del estudio es que no había más de 100 cocodrilos.
Sin embargo, los recorridos en el perímetro de dicho paseo dicen lo contrario, los números pueden ser más elevado, pero para tener certeza se van a tener que hacer nuevos censos, porque el proyecto de reubicación de cocodrilos aún se mantiene en pie.
Esa nueva camada de juanchos, de animales pequeños y otros jóvenes, que ya se acostumbraron al hábitat, al murmullo de la gente, de los automóviles, de los ruidos de la ciudad, van a seguir su vida y llegarán a la adultez.
Las autoridades como Profepa han realizado recorridos y retirado huevos de cocodrilo de los nidos, todo pensando en tratar de mantener las poblaciones de estos animales, pero lo que es un hecho es que pese a todo, hay huevos que han eclosionado con éxito.
NOM. Especie protegida para su preservación
A través de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), realiza un censo de cocodrilos en el sur del estado con el fin de determinar el estado actual de la especie y valorar si existe una sobrepoblación que justifique un aprovechamiento controlado de su carne y piel.
La titular Karina Saldívar Lartigue, informó que el estudio tiene un avance del 60 % y deberá concluirse a inicios de 2026. Con los resultados, el gobierno estatal buscaría solicitar a la federación una modificación a la norma Semarnat 059, que actualmente protege al cocodrilo como especie en riesgo.
Por su parte, César Cedillo, presidente del Comité de Interacciones Humano-Cocodrilo en México, aclaró que el aumento de avistamientos se debe, en parte, a la expansión urbana sobre los cuerpos de agua naturales.
Cedillo recordó que, al ser una especie protegida, está prohibido cazar o aprovechar cocodrilos silvestres, y que cualquier uso de su carne o piel solo sería posible mediante granjas especializadas.
yc