Las anfetaminas y metanfetaminas son las drogas que con mayor frecuencia aparecen en los exámenes de antidoping aplicados a los choferes del Sistema Integrado de Transporte (SIT). En lo que va de 2025, se han registrado 16 resultados positivos, informó la Dirección de Movilidad de León.
Rodolfo Lugo Pacheco, titular de la dependencia, explicó que se mantiene un monitoreo constante para verificar en qué condiciones salen los operadores a brindar el servicio de transporte.

“Voy a centrarme más en el antidoping, que es el que de alguna manera se ha presentado”, señaló el funcionario.
Los controles se realizan de forma aleatoria y sorpresiva entre los más de mil 500 operadores que prestan servicio en la ciudad. Los chequeos diarios se hacen en grupos de cinco conductores, lo que permite detectar de manera oportuna a quienes consumen sustancias prohibidas.
En caso de que un chofer resulte positivo, primero se confirma el hallazgo y después se notifica a la empresa concesionaria. El operador no puede volver a tomar un autobús hasta que un médico externo certifique que está rehabilitado.
“En caso que resulte positivo, que se reafirme, entonces sí viene la sanción. Le hacemos de conocimiento a la empresa que no puede volver a tomar un autobús hasta que no muestre a través de otro médico que está rehabilitado y que puede volver al servicio. La sanción que se aplica está en Umas pero al día de hoy está en 10 mil 182 pesos”, detalló Lugo Pacheco.
El pago de la multa corresponde directamente al operador. Además, se les obliga a presentar exámenes de seguimiento cada tres meses para garantizar que no reincidan en el consumo.
El director precisó que, en algunos casos, los conductores han demostrado que se trató de falsos positivos debido a medicamentos específicos. En esas situaciones, únicamente se emite un apercibimiento y no se aplica sanción económica.
Durante 2024, el SIT practicó 6 mil 938 pruebas de antidoping y 8 mil 395 de alcoholimetría, con un total de 34 casos positivos, más cinco procesos pendientes del año anterior. De todos ellos, solo tres operadores lograron reincorporarse después de cumplir con los protocolos de rehabilitación y certificación.