El Cardenal de Guadalajara lamentó profundamente el asesinato de Lalito, el joven aficionado de las Chivas, que murió por heridas de arma blanca la noche del viernes, luego de ser atacado después de participar en la serenata a su equipo de fútbol favorito.
José Francisco Robles Ortega, calificó el hecho que sucedió este viernes cuando el joven acudió a llevarle serenata a los jugadores del Guadalajara que se enfrentarían el sábado ante el Atlas, como una muestra alarmante de fanatismo y descomposición social.
El prelado agregó que el deporte debe ser motivo de convivencia, alegría y unión, no de violencia ni de agresión entre personas que apoyan equipos distintos.
"El tema de la violencia por el deporte, pues es muy lamentable. El deporte es una actividad humana que nos debe de llevar a convivir, a convivir, a alegrarnos juntos, a compartir. Y sabemos que en el deporte se pierde y se gana, pero no tiene que ver nada con la vida, o sea, todo sigue adelante. Entonces, cuando hay ese tipo de fanatismos de agredir al otro, porque le apuesta a un equipo que no es el mío, pues algo anda grave, anda mal en la mentalidad", sentenció Robles Ortega.
Que se garantice la justicia en este y todos los casos
El líder catolico en Guadalajara pidió a las autoridades investigar el caso a fondo y garantizar justicia. Asimismo, subrayó la importancia de fortalecer las acciones preventivas para evitar que hechos como éste se repitan.
"No podemos dejar pasar que eso ya es normal, no es normal que una actividad humana que nos debe de llevar a la convivencia sana y armónica se convierta en una ocasión de daño y daño tan grave como quitar la vida de alguien", dijo el también arzobispo de Guadalajara.
El caso de Lalito, menor de edad de apenas 16 años, causó indignación tanto en la Universidad de Guadalajara, donde pertenecía a la Preparatoria Regional de Santa Anita, como de familiares y amigos que exigen justicia ante este acto vil que le quitó la vida.
OV